Reside en:
West Tampa, (Florida, EEUU)

Nacida en:
La Habana, (Cuba)

Esta te quieta te digo

(Jotabem)


Esta muchacha te digo
Esta acabando conmigo.

Esta se muere y revive
Esta no deja ni vive.
Esta se marcha inclusive
Esta que se desactive.

Centroamérica llora
Esta es una abusadora.

Esta nunca tuvo amigo,
Esta váyase y no chive
casi al Caribe devora.



Hoy quisiera preguntarte ... ¿Qué guardas dentro del pecho?

(Jotabé Derivado hexadecasílabo)


Hoy quisiera preguntarte ¿Qué guardas dentro del pecho?
si pretendes resguardarte, de un amor insatisfecho.

Quiero amarte vida mía para sentirme en tu abrazo
hacer de la noche el día, como duende en su regazo.
Quiero tener valentía para darte un solo plazo
marchar de esta cobardía, sin sentir ningún flechazo.

Quiero escuchar la sonrisa, que dibujes mi existencia,
y no sentir en la prisa lo raudo de tu inconsciencia.

No deseo defraudarte porque mi mundo es estrecho.
Hay mucha melancolía, verso a verso me disfrazo
te has bebido hasta mi risa, ya no hay luz, solo conciencia.


(Jotabem Derivado 1)


Hoy quisiera preguntarte
si pretendes resguardarte.

Quiero amarte vida mía
hacer de la noche el día.
Quiero tener valentía
marchar de esta cobardía.

Quiero escuchar la sonrisa
y no sentir en la prisa...

No deseo defraudarte
hay mucha melancolía,
te has bebido hasta mi risa.


(Jotabem Derivado 2)


¿Qué guardas dentro del pecho
de un amor insatisfecho?

Para sentirme en tu abrazo
como duende en su regazo.
Para darte un solo plazo,
sin sentir ningún flechazo.

Que dibujes mi existencia,
lo raudo de tu inconsciencia.

Porque mi mundo es estrecho.
verso a verso me disfrazo
ya no hay luz, solo conciencia.



El ciclo de la vida

(Jotabem Espejo)


Enfadada Doña Aleja
un mal le duele, y la aqueja.

Mira, es que hoy por la mañana
salió tranquila y lozana,
al jardín por la ventana
de su hogar, flor de campana.

Y se puso muy llorosa
porque no encontró una rosa.

Ante la reina se queja,
junto a su tío y su hermana,
lloró, y zumbó tan ansiosa.


El hombre mata y acosa,
ya ni da flor Santa Juana
¿Qué haremos, qué me aconseja?

Ve a tu casa, niña hermosa,
estoy pensando una cosa:

Alístame a valeriana,
al árbol que da manzana.
Dile también a avellana
que te nombro capitana.

¡Di al hombre, mi moraleja,
él depende de una abeja!



Así eres poesía

(Jotabem)


Poesía es una maña
que gira, flota, regaña.

Si no quieres escribir
si no la sientes decir,
se aleja en su devenir
y muere su porvenir.

Poesía es un discurso
que lenta toma su curso.

Plácida niña que araña
con garras en mi existir,
y no escatima un recurso.



Mientras se apagan los soles

(Jotabem)


Mientras se apagan los soles,
encendemos los faroles.

Y se prende una bombilla
de tu cuerpo maravilla.
Tu beso sabor vainilla
como un río por mi orilla.

Un saltamontes cantaba
mientras la luna escalaba,

por las notas de bemoles
bajabas a mi escotilla,
plena de amor... Suspiraba.



La ciudad bajo mis pies

(Jotabé)


¡Si el silencio es sigilo que acostumbra!
¿Qué ademanes infinitos me alumbra?

Vislumbra la palabra soñadora,
de este amor que en mi pecho te atesora.
La ciudad resucita abarcadora
a mis pies, esta paz acogedora.

Otrora huye el verso incuestionable,
se aleja del tumulto indeseable.

Estable el pensamiento en la penumbra,
con un beso fugaz por donde aflora
la noche que se vuelve inigualable.



La escapada

(Jotabem écfrasis)

(Écfrasis sobre el cuadro Huyendo de la crítica de Pere Borrell)


De forma precipitada
con su carita asustada.

Apremia el tiempo madruga,
por la ventana se fuga.
Una pena que se enjuga
sobre el gesto que conjuga.

Ante el pintor sorprendido,
queda el niño suspendido.

De su posible escapada
sobre el lienzo se ataruga,
y al marco queda adherido.






El mensaje

(Jotabé hexadecasílabo u octonario)

(Écfrasis del cuadro El mensaje de Luis Miguel Rodriguez)


Como altar, tomó mi silla, santísima milagrosa,
impetuosa va en la quilla del ave calamitosa.

Glosa la verde manigua, desde la tierra al palmar,
abordar solo apacigua los salmos de pleamar.
Mirar de manera ambigua, los cuadros al caminar
apabullar a la antigua, con los pies acariciar.

Aderezar tu linaje, con la piel del girasol.
Tornasol, luce tu traje, donde ilumina el resol.

Aguasol cepa amarilla, donde la mazorca posa,
Airosa madre santigua, este augurio al confesar...
Invocar este mensaje, justo donde nace el sol.






De que callada manera

(Jotabem Espejo)


Yo sentada ante tu puerta
a la espera, boquiabierta.

Tu ausente que yo venía
algo raro pasaría,
no era habitual lo sabía,
pero el riesgo correría.

Una brisa lisonjera
de amiga y de compañera.

Junto al banco de tu huerta
con gran carga de energía,
pasaba mi vida entera.


De que callada manera
yo esperé esta profecía
¡Ánimo! me dije, y acierta.

Di unos pasos en la acera,
y si mi toque no oyera...

Me empiné con rebeldía
valor, empuje, osadía.
¡Y si la puerta no abría
juré que nunca volvía!

Entre disputa y reyerta,
soñando estaba despierta.



En estos tiempos de hoy...

(Jotabem)


Pobre guajiro cansado
de su salario asustado.

Tiene tanto que perder
y muy poco que vender.
Ya no sabe que va a hacer
para el hogar mantener,

como todo campesino
tiene un sitio ya mohíno.

Donde escasea el ganado
la tierra no es su poder
y a nadie importa un comino.



Ya no me dejas dormir

(Jotabem)


Cada noche en tu sentir
no me dejas ni dormir.

Y dominas mi caricia
con secretos y malicia.
Tu abrazo suave delicia
donde mi sueño se inicia.

Y tu cuerpo queda ardiente,
junto al mío ya durmiente.

Entonces me haces reír
provocando con codicia
mi energía dulcemente.



La entrada del otoño

(Jotabemo)


Es otoño, yo deliro,
canta la tierra y respiro.

Vuelven mis pies a sentir
las hojas en su crujir.
Otra vez en mi existir
la premura de reír.

Nada me apura o marchita.
si el tiempo se extralimita.

Surge un complot, un retiro,
cada tarde ya al partir
justo en la noche, una cita.


Retoza el cielo y le miro
lleva un mantón de zafiro.

Mas me vuelve a describír
¿Quién se lo podrá impedir?
si le gusta presumir
su alegría por vivir.

En la puerta de la ermita
se oye una voz que me grita.

y yo dejo en un suspiro
el viento que al sonreír
bate el verso que me agita.



Canto a la paz

(Jotabem)


Haz del hoy, un día tenaz
muestra inquietud por la paz.

No te conformes con todo,
sé creador de algún modo.
Busca justicia, acomodo
con propiedad sin apodo.

La paz mundial lo merece
porque además pertenece

al hombre que es muy capaz
de ilustrar con fuerte epodo
cualquier canto que estremece.



Me contagia su alegría

(Jotabem)


Un gigante se ha escondido,
más bien parece dormido.

En copos blancos de nieve
en algodones, ¡Se atreve!
¡Ya es mediodía y no llueve!
¡Válgame Dios! ...Semibreve,

su pertinaz compañía
es mi pan de cada día.

Y el cielo casi embebido
forma parte del relieve
brindándonos su alegría.



Date ese tiempo que buscas

(Jotabem)


Dale un respiro a tu risa,
date amor, con calma o prisa.

Da un bendecido paseo
por la mar, date un recreo.
Date tiempo, o algún deseo
que Dios te da de trofeo,

ese pedazo completo.
Con humildad te receto,

sale al sol, vive la brisa,
sin más acá y más rodeo
que tú mereces respeto...



Hoy

(Jotabé dodecasílabo)


La señorita luna con su desvelo,
al cuido de mis sueños, allá en el cielo.

Descansa concentrada pone atención,
entre sábanas blancas, lino y algodón.
Yo sé en su rostro, no hay preocupación,
Estoy con mi familia, sin distinción.

La señorita Luna está clareada,
en los rayos de su sol, ya es madrugada.

Ya tranquila sin distancia y sin recelo,
con regocijo plena en satisfacción.
Muestra su mejor cara, se siente amada.



Romance en la mar

(Jotabém)


Ya no le teme al naufragio,
ni a las sombras, ni al presagio,

de la mar que turbulenta
desata la gris tormenta,
cuando se vuelve o se ausenta
la brisa que descontenta,

se quiebra donde suspira
un alma triste que gira.

La marea es un contagio
del amor que sólo intenta
besar la arena que mira.



Amor y fe...

(Jotabem)


De un mensaje inesperado,
un poema lastimado.

Como la brisa que grita
por el vaivén que la irrita,
del viento que extralimita
ese empuje que él limita.

¡Amor y fe!... ¡Tu egoísmo,
será sentencia a ti mismo!

La balanza del pasado
al presente deja, evita,
caer al profundo abismo.



Romance nocturno

(Jotabé 5-7-5)


Hojas perfectas teñidas por la noche de azul intenso,
cantaba un grillo su conocida estrofa todo indefenso.

Las golondrinas, se cruzan con el viento sobre el nogal,
sé que han nacido retoños clandestinos, todo al final.
Por cada rama se endulza cada fruto, con madrigal.
la transparencia del cielo es infinito, savia otoñal.

Húmedas notas lenguaje de las hierbas, en remolino.
vuela un secreto desconsoladamente, tejido fino.

La Luna besa la sombra sumergida, que va en ascenso.
Cuantos te miran princesa enamorada, ninfa ideal,
tañen gorriones al translúcido espacio, todo mohíno.



Extraña noche

(Jotabem)


Lluviosa noche tampeña
con esa Luna risueña.

Recordándonos que existo
y que a veces he previsto
ese dolor que resisto,
pero ahora yo, desisto.

mientras tú te ves feliz
Olvidas mi cicatriz.

¿Cómo creer que se empeña
ese amor que no conquisto
para volverme infeliz?



La yuca de Casimiro

(Jotabém con estrambote)


¿Es tu yuca Casimiro?
¡Lleno el surco, buen guajiro!

Con esa yunta de bueyes
gritando: _ !Princesa o reyes!
¡Condenado o curujeyes!
Por los nombrados bateyes.

Y esa yuca con empella
Ron a pico de botella.

Y me devuelvo un suspiro
y quiero olvidar las leyes,
que hicieron tan vil querella.

Isla bella,
siempre Cuba bien amada,
cada noche en mi almohada.



Afanes de gnomos

(Jotabé hexadecasílabo u octonario)


Un gnomo despabilado con alta temperatura,
parecía alucinado tocando en abreviatura.

A otro gnomo referías ser director de la orquesta
caminando respondías, imaginabas la fiesta.
con notas lo persuadías en medio de la floresta.
Eres pillo, ¡Lo sabías! por eso pesa tu testa.

Canta rápido, camina, tan ilustre cantorcito
enchufando la bocina, para oírte más bonito.

El gnomo desorbitado reflejaba tal ternura.
A todos nos consentías para ganarme la apuesta,
pero tú la noche empinas, es tanto afán, Lazarito.



Vamos Coqui...

(Jotabem)


I

Canta Coqui, canta claro
que contigo no hay reparo.

Usted dejó su bohío
por un camino baldío,
yo sé, seguro el rocío
cubre su cuerpo de frío.

Vamos Coqui enorgullece
que el camino se enderece.

Todo en vida, cuesta caro
y el estómago vacío,
un jíbaro no merece.


II

Vamos Coqui canta haz bulla
un Réquiem, un Aleluya.

Busca, emprende nuevas metas
toma el bastón, haz maletas,
que al doblar por las cunetas
habrás pintado viñetas.

Vamos Coqui emprendedor
que no hay luz si no hay color.

Canta, canta, canta arrulla
pinta las marcas, saetas
por donde cruza el pintor.



Triste realidad

(Jotabem)


¿Qué le preocupa a la nena
qué la agobia, qué le apena?

Es muy temprano y la duda
la ha dejado casi muda,
sale pronto, busca ayuda
su tristeza extrema, aguda.

A todo teme y se espanta
tiembla su cuerpo, no aguanta.

No creas que ella es ajena
a su calma sordomuda,
cuando su voz se atraganta.



Agosto

(Jotabem)


Bello se presenta el día
con su luz todo evadía,

los recuerdos del amado
los besos que no se han dado,
los mimos que han añorado
del suspiro malogrado.

Lejos la lluvia lo agobia,
él, extrañando a su novia

agosto pleno confía,
porque el sol enamorado
duerme sin mancha y sin fobia.



A Eusebio Leal...

(3 Jotabem)


En las puertas de La Habana,
vistió de gris la mañana.

Tu voz se vuelve sustento
en las calles de momento,
la Giraldilla en el viento
es presagio y argumento.

En La Avenida del Puerto
todo quedó como muerto.

Y tu lírica soprana,
historiador en portento
Eusebio, quedas liberto.


II

Me gustaba esa manera
de hablar aunque no aplaudiera.

Me gustaba el clarinete
cuando hablabas del machete,
de Maceo su encopete
sin rango, sin brazalete.

Cuando hablabas de Mariana,
del miedo que no amilana.

Y todo vuelve a la vera
en la ceiba del templete
como pócima cubana.


III

Y allí en la calle de Paula
Mi escuela, el salón, el aula.

Y con orgullo cubano,
tu amabas al artesano,
que nos tomo de su mano
con pensamiento Martiano.

En su fragua resguardabas,
lo que en Martí tu avalabas.

Tu esencia queda sin jaula
en la furia del desgano,
por la ciudad que añorabas.



Corre el tiempo un signo leo

(Jotabem)


Allí durmió sin saber
una preciosa mujer.

La mística sirenita
a su pensar resucita,
lo sofoca, luego excita
cuando en la arena dormita.

Corre el tiempo, un signo leo
es de Piscis su recreo.

Sé que va desfallecer
porque en sus manos palpita,
como un hermoso trofeo.



Tronco que nació torcido

(Jotabém)


Árbol que nace torcido
continúa retorcido.

Jamás el tronco endereza
ni levanta la cabeza,
solo destila vileza
entre la rama y corteza.

Ni su tronco fuerte asombra,
porque no es sana su sombra.

Su follaje corrompido
sin alma es pura bajeza
nadie le advierte y le nombra.



Año nuevo, dos mil veinte

(Jotabeim)


1- Inicio

Hemos empezado un año
con un designio muy extraño.

Es que el hombre no escarmienta
todo disuelve y fomenta,
el mundo ya se impacienta
un virus destruye, aumenta,

fauces de un laboratorio
engendro de un escritorio.

De nada sirve un regaño
si la muerte polvorienta
no es signo de buen jolgorio.


2. Cronología

Por el mundo se extendió
a muchos exterminó.

Devastando los pulmones
y dañando los riñones,
Microbios, interacciones
sin razas y distinciones.

Atacando fuerte ilógico
al sistema inmunológico.

La parca no escatimó
y sin muchas excepciones
sigue un orden cronológico.


3. Pandemia

Pánico, tristeza, horrores
Peste, inmundicia, temores.

Crece, crece la epidemia
convertida en ya en pandemia.
Los sabios con academia
buscan lo que tanto apremia

El mundo está sumergido
con su dolor sometido.

¿Habrá nuevos sinsabores?
La pena y la calma premia
cuando el dolor es seguido.


4. Cuarentena

Cuarenta días creía
escribiendo poesía.

Era todo un gran desierto
casi soñaba despierto,
sombrío además de muerto
sobre un pasadizo yerto.

La melancolía deja
un susurrar en mi oreja.

Nunca fue una pasantía
si no un camino encubierto
yo le llamo moraleja.


5. Confinamiento

Llora una playa cerrada
y una calle desolada.

Una distancia social
por una bestia infernal.
Con mascarilla facial,
ni un abrazo fraternal.

Hasta se ha negado un beso,
ni un te quiero sale ileso.

La gente malhumorada
ya de forma general
sienten todo en retroceso.


6. Niños

Oh, mi Dios, y los infantes
con juegos traumatizantes.

Amasando su dolor
desde su cárcel menor.
Aquel encierro es peor
que en castigo con rigor.

Por la casa y sus rincones
con sus propias decisiones.

Aventuras excitantes
sus sonrisas todo amor
¡Niños, puros campeones!


7. Ancianos

Ellos son tan vulnerables
por demás tan inestables.

La edad es su cuerda floja
cualquier infección lo afloja,
deliran en su congoja
hasta respirar se antoja.

De pasos nada seguros
el alzhéimer, sus conjuros.

Con cifras interminables
el Covid golpea arroja,
por los sitios extramuros.


8. Médicos

¿De ellos quien se preocupa
por ellos, quien más se ocupa?

Ellos están en el fuego
con sus vidas siempre en juego.
Nunca dejan para luego
la vida que ahora es ruego.

Día, noche, y madrugada
sin descanso, desvelada.

Cuando el cansancio se agrupa
casi sin vida y sosiego,
un sermón no vale nada.


9. Indisciplina

La cuarentena termina
y la vida se encamina.

Con reglas modificadas
que deben ser respetadas,
por médicos avaladas
de los hombres transitadas.

Pero en cualquier sociedad
no todo va en unidad.

Entonces se determina
con palabras rebuscadas,
ya no más ambigüedad.


10. Familia

Pero nunca la familia
gozó con tanta vigilia.

Y en tanto la larga espera
es surrealismo en la era,
el cariño se venera
cuando ni un roce exaspera.

Hay cenas, no hay comensales
y detrás de los cristales,

un sentir que se concilia
cuando el amor acelera,
los delirios fantasmales.


11. Adversario

El hombre cabeza hueca
materia gris, casi seca.

Si Dios nos dio la fortuna
de mirarnos en la luna.
¿Por qué la crisis, la hambruna
un virus, que ya importuna?

Los muertos en solitario
sin tumba y sin más erario.

Que termine la jaqueca,
si al inventar la vacuna
matamos al adversario.


(Poesía ganadora de una Mención Especial del III Concurso Internacional de Poesía El mundo suena en Jotabé)



Cansancio

(Jotabem)


Y se cansó de bogar
como también de esperar.

Y se cansó donde vira
el manantial de su lira.
Y se cansó porque expira
el viento donde él respira.

Y se perdió la esperanza
en la punta de una lanza.

Y se cansó de llorar
y se excusó en la mentira,
pero nunca en la venganza.



Como una ola

(Jotabem)


Vuelve truncada sin traje,
cada ola, del largo viaje.

Ella vuelve redimida
como gaviota vencida.
No le teme a la embestida
de la mar enfurecida.

Y cuando llega a la orilla
besa la suave rodilla.

Presumida en el voltaje
en la corriente temida,
caricia imberbe cosquilla.



¿Dime cómo amor?

(Jotabem)


¿Cómo pudo con su trino
acercarse a mi camino?

¿Cómo pudo sin aliento
dejar mi pecho contento?
¿Cómo pudo su lamento
mover un molino al viento?

¿Cómo pudo su canción
robarse mi corazón?

¿Cómo es sabio mi destino
cuando allá en el firmamento,
me estrecha con tal pasión?



Huevos al plato sin el plato

(Jotabé octonario)


Solo tú pintor de antojos expones un huevo frito...
Ay, Dalí, cómo recreas tu nacimiento cual mito.

¿Acaso tenías hambre pintor allí en las entrañas?
O quizás por los dolores, te hicieron ver musarañas.
Ves, a tanta profundidad, malograste las montañas.
Porque en los tonos primarios colapsaron tus pestañas.

Es que tus huevos al plato, se recrean, me parece,
que quien te mira se pierde, por cada trazo que crece.

Oh, Dalí, por tu grandeza sigues siendo un erudito,
cuando un huevo cocinado revuelto de telarañas,
toma un valor de millones y mi cultura florece.



Añoranzas

(Jotabé)


De tarde allí volvió, junto a la banca,
y en el árbol, cantaba un aliblanca,

miraba al horizonte tan perdido,
titubeante andaba sin sentido,
semejaba un anciano desvalido,
aquel ser, plenamente confundido...

Del cerezo caían flores rosas,
como el vuelo de airadas mariposas.

Desde el cielo una nube rara, blanca,
le entregaba en mensaje conocido...
Mientras él, valoraba ciertas cosas.



Eres m luz

(Jotabé)


Tú, con esa energía contaminas
con sonrisas mi mundo lo encaminas.

Con tu calor me das seguridad
y tu fuerza me da la libertad
Tú eres mi amor y toda la verdad
Eres mi luz en esa oscuridad.

eres maestro y mi mejor ejemplo
quien pone los ladrillos a mi templo.

Tú mi amigo que sabes y dominas
Cada emoción y su necesidad
Padre, padre en ti me miro y contemplo.



Pensamiento

(Jotabem)


Mi pensamiento disperso
sugestivo, siempre inmerso,

en ese lejano mar
cada noche mi pilar,
él me hace contar impar
un suspiro que a la par,

me brota de mis entrañas
y calamitoso empañas.

Y yo escucho al universo
de rodillas en mi altar
Gloria a Dios que me regañas.



Yo espero, tú decides

(Jotabem)


Espero que no lo olvides
porque además, tú decides.

Sobre un mar de pleitesías
de agotadas travesías,
en tantas descortesías
timonel en demasías.

El amor es otra cosa
no una espera que dudosa.

Espero que no descuides
las noches de fantasías
en los brazos de una diosa.



Palabras, sólo palabras

(Jotabem)


Palabras de una canción
letras sin inspiración.

Palabras donde te evoco
todo el deseo que invoco.
Promesas donde provoco
cuando te miro o te toco.

Todas son un juramento
pacto grávido del viento.

Vocablo sin dirección,
que a veces poquito a poco
nos nutre de descontento.



Nostalgia

(Jotabem)


Cuando pactas confundida,
pareces desentendida.

Unes los versos que estanco
para lanzarlo al barranco.
Manchas dejas en cilanco
por un silencio no franco.

Como te has vuelto pedante,
con tu caricia irritante.

Así me pagas en vida
por unas rimas en blanco
te aseguro, Dios mediante.



Suspiros alentadores

(Jotabem)


Vibra el cántico sinsonte
en el reverde del monte.

Cual cúmulo de palmeras
dulce arrullo le confieras,
del viento filibusteras
soltasen sus cabelleras.

Un suspiro a mis amores
en mis recuerdos deudores.

Que en mi sentir se remonte
mensajes, los más que quieras
y versos alentadores.



¿Confinamiento?

(Jotabé octonario con doble rima)


Después de pasar los meses metidos en cuarentena,
espero que digirieses miel, harina, leche, avena.

Que si las papitas fritas, que si filete miñón,
un pollo con mariquitas y después pan con jamón.
De la boca no me quitas esta horrible sensación,
ya parecemos bolitas que ruedan como balón.

Así es este estancamiento sólo nos da por comer,
en constante aburrimiento ¿qué más podemos hacer?

No creo te arrepintieses al dejarte la melena,
con esas garras benditas te pareces a un león
así es el confinamiento, nos echamos a perder.



Entre el mar y el infinito

(Jotabem con estrambote)


Entre el mar y el horizonte
blasfema un ruin mastodonte.

Y escucha a la espuma brava
correr por su vena cava.
Un torrente se deslava
la bonanza no es su esclava,

va en busca, de aquel bendito
que hizo malograr su mito.

Una endecha polizonte
como un puñal se me clava,
entre el mar y el infinito.

Necesito:
Termine esta cruel quimera,
que el alma muere a la espera.



Mirando los contactos

(Jotabé)


El mira su teléfono y se acuerda,
un número que tanto le recuerda.

Quieres llamar para escuchar su voz,
pero no entiendes, no eres portavoz
mirar al cielo no te hace veloz
sientes su ausencia, ¡Fue algo muy precoz!

Entonces el silencio resucita,
tu corazón de hijo, suave palpita.

Con calma amaneces y se concuerda,
no olvidas el dolor es algo atroz
besas su mano tierna, suavecita.



Detalles

(Jotabé dodecasílabo)


He mirado para afuera tantas veces,
y he sentido ese dolor que no mereces.

He escuchado tu sonrisa entre gemidos,
y tus manos conquistando mis sentidos.
Nuestros besos corretean escondidos,
orientados por el pulso y sus latidos.

Una lágrima se asoma a la ventana
y me pierdes en tu angustia diluviana.

Cuan sincero es el amor si resplandeces,
y no olvidas los detalles concebidos
si en tu mente yo me vuelvo cotidiana.



Descansa mi ángel, descansa

(Jotabem)


- ¿Cómo defino tu ruego?
- Amoroso como un juego.

Siento tu voz en mi pecho
que me conduce hasta el lecho.
Descansa mi ángel, yo te echo
de menos, y no sospecho,

en tus sueños me aparezca,
y usted, sonriente enmudezca...

Con mi beso ya de fuego,
en tu boca es como un hecho
te despierte y te enloquezca.



¿Qué vamos a hacer los dos?

(Jotabem)


En medio de esta locura
yo me ajusto a tu ternura.

Mientras la vida es momento
yo me acerco a un sentimiento,
aunque parezca violento
entre tus brazos, soy viento.

Volando el atardecer
me haces sentir, más mujer.

Sigo atada a tu cintura
con ese ritmo sediento
que no me dejas mover.

¿Qué voy a hacer?
¿Qué vamos a hacer los dos?
Sólo lo sabe, ¡Mi Dios!



Ansiedad

(Jotabé octonario con doble rima)


Hoy comienzo la mañana con el néctar de tu aroma,
Y al mirar por la ventana la distancia que me doma.

Es duro este cruel castigo, porque estamos separados,
sentirse sin paz ni abrigo, corazones enlutados...
Aunque tú, sigues conmigo, tras los vientos solapados
y yo prosigo y prosigo recuerdos desesperados,

mejor deja que resguarde tu cariño y tu dulzura,
porque mi pecho es alarde donde tu risa es frescura.

Donde tu mente profana mi sentir cuando se aploma
de este amor, somos testigo fragmentos enamorados
y va muriendo en la tarde todo el dolor que me dura.



Amor a ciegas

(Jotabem)


Yo lo sentí irresistible
con un aspecto infalible.

Parecía muy maduro
y que su amor, era puro.
Algo escondía en su apuro
detalles que nunca auguro.

Amor ciego a cada aurora
desconfianza a cualquier hora.

Cada sentido sensible
cuando todo va inseguro...
Y día a día empeora.



Los verdaderos campeones

(Jotabem)

Para todos esos niños que están encerrados 24 + 24 + 24 horas en sus casas, muchos sin comprender el por qué, está dedicado este poema, en especial a mis tres nietos
Máximo, lianny y Valeria.


Un niño nos da lecciones
e increíbles emociones.

Llegada esta cuarentena
la casa se desordena,
en este encierro da pena
la energía que almacena.

Mínimo busca un detalle
para no estar en la calle.

Ellos, puros campeones
de este mal que lo condena,
sin que nada lo avasalle.



Armonía

(Jotabem)


Preparo un rico licor,
un café, de suave olor.

¡Qué manera de alegrar
a mi ayuno y paladar!
¡Qué incesante suspirar
ese aroma es mi gozar!

Y mis labios asombrados
se quedan como extasiados.

Con ese rico sabor
que me hace ahora rimar,
los recuerdos confiscados.



Este verso mío...

(Jotabem)


Mi verso es como un sombrero,
que cubre su semillero.

Junto a mi sombra es mi estrella,
es luz, es chispa, y centella.
Él deja profunda huella
aunque se rompe no mella.

Es mi cura sin embargo,
me deja siempre en letargo.

Mi verso es un cancionero
que su fuerza me atropella,
cuando su canto es amargo.



En cuarentena inventando

(Jotabem hexasílabo)


Esto es maravilla
Melón de Castilla...

En dulce, ricura
y qué sabrosura,
el gusto me apura
el hambre no augura,

pero quien suplanta
el queso, le imanta.

Es cosa sencilla
la fruta madura
me encanta, me encanta.



En cuarentena

(Jotabem con estrambote)


Debemos estar en casa
para ver si este mal pasa.

Sobre todo estar tranquilo;
¿Quién sabe si aumento un kilo?
Guantes, careta y desfilo,
a cuidarse sin estilo.

Esta pandemia te engrampa
como si nada, es la trampa.

Después, paseos en masa
es como yo lo asimilo:
La cubanita de Tampa.

Llueve y escampa
esto es más que un desafío
¡Cleme responde mi envío!



Entre refranes y dichos, hay cosas que nunca he dicho

(Jotabé)


El mundo nuevo hoy, nos impone metas
pájaros tiran a las escopetas.

Si el árbol nació torcido, ¿Qué hacer?
¡Bonsái!, más vale tarde, que perder.
A todo vendido, algo recoger,
al madrugador Dios ayuda a ver.

Visteme despacio que tengo prisa.
Dar pan a perro ajeno, no es de risa.

Zapatero vamos, no más chancletas,
lo prometido es deuda, y es un deber
Palabras necias, boca sin sonrisa.



Esos ojitos

(Jotabem)


¡Ay!, ¡mis ojitos tediosos!
¿Te parecen misteriosos?

¡Ay! mis ojitos huraños
que te miran tan extraños.
¡Si te buscaron por años
y no saben de regaños!

¡Ay! ¡Mis ojitos de intrigas
que te pican como hormigas!

Esos ojitos golosos
van subiendo tus peldaños
con dulzura y sin fatigas.



Yo quiero, y me quiero

(Jotabé pentadecasílabo)


Yo quiero volver a ver a los niños sonreír,
y quiero ver alegría en su modo de existir.

Sabes, quiero caminar por la vida sin temores,
también quiero del arcoíris fantásticos colores.
Deseo ver gotas de lluvia rodar por las flores
Y que termine extinta esta pandemia, sus horrores.

Honestamente quiero esta inmundicia se deshaga,
que no continúe siendo historia, que ella, no es saga.

Yo quiero descartar lo infame que es así vivir
encerrados entre cuatro paredes, ser deudores;
Huyendo del hombre que lo difunde y lo propaga.



Ya me canso de mirarte

(Jotabem con estrambote)


Un buscador de amoríos
perdió su ruta en envíos.

Cazó una presa inconforme
con su trampa ya deforme.
Hoy su roce filiforme
deja una llaga disforme.

Y el cazador sin descanso,
sólo queda en su remanso.

Entre promesas y hastíos
su caza fue cruda, enorme
lidiando al desdén que manso,

ya me canso
de mirar al cazador,
como méndigo de amor.



Falsas emociones

(Jotabem hexasílabo)


Vivir de recuerdos,
malsanos acuerdos.

Vivir engañados
estar abrumados,
y desconsolados
por estar callados.

Salvar la ilusión
de falsa emoción.

Tantos desacuerdos,
dejan agotados
mente y corazón.



Uniendo a dos que estaban separados

(Jotabé)


¿Cómo voy a unir a dos, si separados,
no han podido olvidar cuán lastimados?

Caprichos ya rebasan su cordura
la ocasión donde tienta una locura,
las manos sobre un cuerpo, una figura,
por dolor, se sustenta la amargura...

Separados viven sus relaciones
no han aprendido del tiempo y estaciones...

Es mejor los silencios prolongados
que aferrarse a la herida que no cura,
y fingir todo fueron concesiones.



No hubo que mover un dedo...

(Jotabé pentadecasílabo)


No hubo que tirar balas para que el hombre muriera,
ni hubo que lanzar bombas, para que el mal se
[ expandiera.

El mundo se enfrenta ahora, a un virus desconocido.
El poder, más ambición, con maldad lo han resarcido.
Dinero: Mueves todo, junto al rico mal parido,
el pobre que nada tiene doblemente ha sufrido.

No hubo botón, ni misiles, porque a nadie apuntamos,
ni gases venenosos contra huelgas por reclamos.

Ves que no hace falta un muro, vuelos, o la frontera,
porque el mundo aislado se muere; Triste y adolorido,
sin rangos, diferencias, hoy castigados estamos.



A sabiendas que el amor...

(Jotabé pentadecasílabo)


A sabiendas que el amor es el pan de cada día,
a sabiendas que el amor, tiene un precio, no se fía.

A sabiendas que el amor pinta el color del paisaje,
a sabiendas un sencillo, atuendo del mismo traje.
A sabiendas que el amor, no tiene raza y linaje,
a sabiendas es unión, ramas de un mismo follaje.

A sabiendas que al amor, cuando le niegas se aleja,
a sabiendas que su luz, se opaca de mucha queja.

A sabiendas que el amor es la inmortal fantasía,
a sabiendas es camino, en el retorno de un viaje...
A sabiendas somos dos, y le nombramos pareja.



Triste mundo de poeta

(Jotabé con estrambote)


Hoy que el mundo agoniza y no hay receta,
Escribe melancólico un poeta.

Escribe de angustias y sinsabores,
en la grieta del alma sus dolores.
Mira a su alrededor, marchitas flores,
hoy son huellas de turbios resplandores.

Triste humanidad quienes te han mutado,
pobre verso, que hoy sigues lastimado.

Hace siglos lo escribió algún profeta
si profanan su conducta, escritores
verán versos perdidos sin agrado.

Un símil mutilado,
será presagio, y el mundo conmovido
borrará rimas, verso prometido.



Nuestra casa...

(Jotabé)


La casa ya huele a ti, a tus refranes,
a lavanda, a rosas, a tulipanes.

La casa sin ti es pura letanía,
es la espera de verte, mi alegría.
Esta casa se mira tan vacía
Si de tarde no me dice: ¡Alma mía!

Esta casa se alegra, en tu presencia,
este amor ya no sabe de carencia.

Somos polos opuestos, dos imanes
de ese beso que en deuda cada día,
deja suave tu boca, en mi existencia.



Así te conocí

(Jotabé birrima)


Sediento del camino polvoriento
evento que trajo tu acercamiento.

Madura tu palabra que procura
segura es manantial por donde augura.
Futura va en los versos de tu altura
comisura en tus labios, mi locura.

Oyendo tu voz, así voy escribiendo
Sintiendo yo tus besos, conociendo...

Aliento que me da tu ofrecimiento
mesura de tu voz sin hendidura,
huyendo de un silencio sin atuendo...



A sabiendas que el amor...

(Jotabé hexadecasílabo - anáfora)


A sabiendas que el amor es el pan de cada día,
a sabiendas que el amor, tiene un precio, no se fía.

A sabiendas que el amor pinta el color del paisaje,
a sabiendas es sencillo, atuendo del mismo traje.
A sabiendas que el amor, no tiene raza y linaje,
a sabiendas es unión, ramas de un mismo follaje.

A sabiendas que al amor, cuando le niegas se aleja,
a sabiendas que su luz, se opaca de mucha queja.

A sabiendas que el amor es la inmortal fantasía,
a sabiendas es camino, en el retorno de un viaje...
A sabiendas somos dos, y le nombramos pareja.



Himno Universal de la Rima Jotabé

(Jotabé hexadecasílabo con doble rima y estrambote)


Brotan versos de consuelo junto a la banda sin par,
de las almas hasta el cielo, para hacernos suspirar.

Nace la musa en la pluma, se apellida inspiración,
nunca se esconde en la bruma, llena de insatisfacción.
Fluye, te abraza, perfuma, todo su canto es pasión,
vuela el terzo, no se esfuma, solo busca compresión.

Salen orondos delires en los sueños del poeta,
danzan parejos suspires, expandiéndose al planeta.

Manas de amor y desvelo, fluyen del río hasta el mar.
coronas con blanca espuma, le das al verso emoción.
sin interrumpir sentires, vuela libre una saeta;

¡Valencia, fue su meta!
¡Y al traspasar la frontera de su cuna el Jotabé,
un mundo pleno lo espera, de amistad, cariño, y fe.


(Poema ganador del Segundo Accésit del IX Certamen Poético Internacional Rima Jotabé)



¡Ven a mi Edén colibrí

(Jotabem monocorde)


Soy suave flor del palmar.
Bebe mi néctar, ¡Tomar!

Entre tus alas la brisa
me turba, en constante risa.
Me quema tu leve prisa
que hasta distante improvisa.

¿En ese Edén escondido
quieres quedarte perdido?

Para poder comenzar,
para hacer justicia omisa
para sentirte querido.


Que esta flor es un rimar
donde vuelves a cantar,

que tu amor ya me precisa
que el pasado se revisa,
que un error se decomisa
de trampa vana y divisa.

Que tu estás enloquecido
que estás happy, también chido.

Que la magia del amar
puso hierba en tu cornisa
y tu nido es bendecido.



Amor distante

(Jotabé dodecasílabo)


Roma siempre me gustó, pero no así,
porque el amor ya no estaba, justo en ti...

Triste el tiempo penetrante hasta los huesos,
fue aquel frío provocado por sucesos.
Aún tomando un licor, no hubo progresos
El destino nos juzgó, ya no más besos.

Armo este rompecabezas y no entiendo
mora en mi pecho, suspiros, no comprendo.

Las rosas hoy continúan frente a mí,
no queremos, para nada, seguir presos
sin amor ya nada crece... Voy muriendo.



Con ojos de mar

(Jotabem hexasílabo)


Me agrada mirar
el azul del mar.

Sus inmensas olas
van y vienen solas,
hacer bataolas
chocan las farolas.

Aparentan mansas
al mirar te cansas.

Bravo es tu cantar
solfeo en vitrolas
aunque nunca transas.



Amor distante

(Jotabé dodecasílabo)


Roma siempre me gustó, pero no así,
porque el amor ya no estaba, justo en ti...

Triste el tiempo penetrante hasta los huesos,
fue aquel frío provocado por sucesos.
Aún tomando un licor, no hubo progresos,
el destino nos juzgó, ya no más besos.

Armo este rompecabezas y no entiendo,
mora en mi pecho, suspiros, no comprendo

Las rosas hoy continúan frente a mí,
no queremos, para nada, seguir presos,
sin amor ya nada crece... Voy muriendo.



Auden Christopher

(Jotabem)


¡Miren que cara, qué bella!
es un amor, una estrella.

Auden: Un niño amoroso
alegre, feliz, mimoso...
El pequeño sabichoso
tiene un porte glamoroso.

¡Cubano, alemán, o griego
o americano, no es juego!

Y por sus genes destella
savia en bonsái que frondoso
es su cariño y su apego.



Huellas de amor y destellos

(Jotabem)


Se va pintando la tarde
de azul de mar, sin alarde.

Y va dejando frescura...
En el beso que me dura,
y en la risa, su envoltura
que me sana y me satura.

Algo aviva y me estremece,
cuando su amor amanece.

Sin tiempo para que aguarde
mi beso que es su locura
que lo abraza y lo enriquece.



Somos...

(Jotabé tridecasílabo)


Somos de aquí, de allá, somos de cualquier parte,
somos mezcla, de los pueblos, y somos arte.

Somos simples, distraídos, somos humanos,
somos constelación, de templos muy cercanos.
Somos viento, agua, cordillera y meridianos,
somos las semillas de Dios y somos granos.

Somos el amor en la esencia valorada,
somos el perdón de una luna enamorada.

Eso somos tú y yo, un cariño que es baluarte,
ante momentos que nos llevan de las manos,
para perdernos en la noche tan mimada.



Respiro amor, en tu amor...

(Jotabem)


Respiro amor, su donaire
que esta volando en el aire.

Respiro, la frase amable,
un gesto que deseable
degusta el sabor estable,
de un corazón vulnerable.

Respiro que nunca a ti,
dejaré decir que sí.

¿Cómo dejar que un desaire,
rompa un minuto adorable
cuando sentimos así?



Entre risas y sorpresas

(Jotabem)


Ustedes se han confundido,
Ya regañé a Don Cupido

Me dijo:¡Qué emocionante
toda la gente espectante!
Y le dije: Es indignante
que tu juegues tan picante.

No os preocupéis princesa
es un bonche, no interesa.

Todo el mundo distraído
Deja hacer algo pedante
La flecha tiro y regresa.



Una entre mil razones

(Jotabé hexadecasílabo)


¿Cuántas razones yo guardo para solo estar contigo?
Yo a tu conquista no falto, porque en tu juego prosigo.

¿Cuántas razones anuncio que tu beso me provoca?
Eres miel entre mis labios, y desatinas mi boca.
Eres esa encrucijada donde mi piel desemboca
eres un acantilado, donde el mar penetra... Choca.

Eres una y mil razones cuando estas cerca de mí...
Eres el canto moreno, desde el día que te vi.

Hay cosas que van surgiendo, toca al tiempo ser testigo,
pero vamos poco a poco donde el amor nos invoca.
¡Vamos despacio cariño!Con dulzura, tú y yo, ¡sí!



Gotas de lluvia y rosas

(Jotabem)


Llueve y llueve que riqueza,
gotas de amor y torpeza.

Sobre la tierra y la grama
sobre el paraguas que trama.
Cuando un abrazo te llama
por el beso que se clama.

Y la rosa es un lamento
en el quejido del viento.

Porque unión es entereza
que al sacrificio reclama
con amor, paz y contento.



Cita de amor

(Jotabem)


De aquel encuentro amistoso
todo fue breve, y grandioso.

Y nos fuimos de paseo
como niños al recreo.
Mirada, risa, ajetreo
de conquista y de deseo.

en "El brindis del bohemio"
fue tu voz, nostalgia y gremio.

Un amanecer glorioso,
aquel rumor, su apogeo
cita de esperanza y premio.



Su amor, su lado travieso

(Jotabem)


Se va durmiendo la luna
sobre el mar cuando la acuna.

Se va durmiendo incesante
en los brazos de su amante.
Va durmiendo fascinante
sobre un cuerpo crepitante.

Y siente un nítido beso
que atormenta su embeleso.

Ella siente gran fortuna:
Él es su mar, su donante
de amor, su lado travieso.



Y llegaste tú...

(Jotabem hexasílabo)


Me trajo la paz
como luz de un haz.

Hay tranquilidad
mucha sobriedad.
No a la oscuridad
eres mi verdad.

Y envuelves con calma
dulcemente el alma.

Sin ningún disfraz
toda tu bondad
mi pecho desalma.



Amor sin excusas

(Jotabea)


¡Ama corazón ama! Me dijo emocionado,
suspira y toma aliento que yo, estoy enamorado.

Amar con fuerzas bravas los simples vericuetos,
que mis latidos lleguen, cómplices, en paz, quietos.
quiero amar tus texturas, la tinta en tus bocetos
tu rostro, tus locuras, tus místicos secretos.

La imagen verdadera que de anhelos supuse,
una fuerza acelera los versos que compuse.

Es tu mirar encanto del beso que marcado,
dejó sobre mi boca deseos en aprietos
amor sereno dame, la calma y no se excuse.



¿Dime cómo y por qué?

(Jotabé eneasílabo)


¿Cómo se iguala una caricia?
¿Cómo se siente su delicia?

¿Cómo penetra una mirada?
¿Cómo se siente su estocada?
¿Cómo me siento enamorada
y me desvelas, madrugada?

¡Cómo te anhelo vida mía
Sin ti, mi casa esta vacía!

¡Cómo se extraña tu malicia,
entre mi espalda perfumada,
tus besos, suave compañía!



El culebrón de las Sores

(Jotabem con estrambote)


Las Sores muy compungidas,
se sentían afligidas.

Porque la noche anterior
un pánico aterrador,
del convento un resplandor
alertó a Sotomayor.

Pues la beata Asunción
pone todo en negación.

Y hubo gritos y corridas
detrás de aquel reptador.
mientras subía al sillón.

¡Culebrón!
¡En la maleta venía,
Juan Benito lo sabíaaaa!



De aniversario

(Jotabem)


Él le dijo: Mamacita,
póngase ropa bonita.

Que esta noche celebramos,
lo mucho que nos amamos.
A tiempo que regresamos
y nuestra siesta tomamos.

Es que somos dos abuelos,
con sueños llenos de anhelos.

Vamos linda ratoncita
se hace tarde, ya nos vamos.
¡Huelo a queso con buñuelos!



Tú piel es sombra y es luz...

(Jotabem monocorde)


Ay, mi niña, mi niñita
siempre con cara bonita.

¿Es el libro qué pidió
el del duende, lo encontró?
¿En qué página buscó
la respuesta que no halló?

Sin café, la rica leche
no creo que te aproveche.

Sin la noche, la lunita
difícil se enamoró
Más bien creo, la despeche.


¡Entonces mi princesita
qué juzgaba su carita!

Siempre el bosque te envolvió
y esa luz vaticinó.
Sanamente la siguió
su sombra te acompañó.

Mira criatura, mi Meche
yo quiero usted se perteche.

Ébano eres muñequita
Dios oscura te pintó:
¡De tristeza no se endeche!



Te recuerdo este día

(Jotabem espejo)


De recuerdos y alegría
transcurre la vida mía.

Nunca dejaré pasar
de esta fecha mencionar,
un poeta de ultramar
que mi mente fue a enlutar.

Honorable literato
de décima y pensar grato.

Su paciente maestría,
le agradezco en mi versar
trovas libres, sin contrato.


Hombre de temple y conato
cuánto me cuesta pintar,
con letras tu poesía.

Rafael Orta, es que trato
de no decir, si desato,

con tu recuerdo un cantar...
¿Quién puede recriminar
lo tierno de tu rimar,
si usted me supo enseñar?

Te fuiste, no es cobardía
recordarte en este día.



9-7-A-Q-2-5-10-J-5-k-7-A-A-A

(Jotabem con estrambote)


Nueve días es muy poco
Siete semanas, evoco.

Amor a primera vista
que aparenta una conquista.
Dos tatuajes la corista,
cinco vueltas en la pista.

Diez de verbena y paloma
juegos prohibidos, sin toma.

Cinco que te vuelven loco
kilos menos, ¡Qué optimista!
siete leguas a la loma.

¡Ah; Qué es broma!
A los naipes, o en las cartas.
A lo mejor las compartas.



A mi nieta encantadora

(Jotabem)


Viste chantú con finesa,
alma tiene de princesa.

En su cara soñadora
toda la infancia atesora...
Es mi peque abrumadora
de actitud encantadora.

¿Me creerás si menciono,
que al mirarle reflexiono?

Que así, sentada a la mesa
con mirada seductora
¡No hay dudas, yo la corono!



Tómalo con calma

(Jotabem hexasílabo)


Tómalo con calma
sin herir el alma.

Cree en la promesa,
pero sal ilesa.
Si el amor regresa
como suave besa.

Mide justo exacto
el tiempo en cada acto.

Si algo se desalma
o tal vez recesa,
deja todo intacto.



El tiempo mi compañero

(Jotabem)


Esta historia trae un bardo,
del comienzo y su retardo.

Es inusual, y no quiero
a las puertas de este enero,
tener mi pecho de acero
sepa usted mi caballero,

me gusta la claridad
sobre todo la verdad.

Pero soy paciente, aguardo
del tiempo mi compañero
y su gran sinceridad.



Las Jotabéfilas

(Jotabem dialogado)


Gertrudis: Esa misma enfermedad
tiene más de la mitad.

Maritza: Y nos pone el pensamiento
a tono y con movimiento.
Gertrudis: Llega sin consentimiento
sin ningún conocimiento.

Maritza: Y se queda en la ruleta
dando brinco y voltereta.

Gertrudis: ¡Mira qué barbaridad!
Maritza: ¡Qué dulzón, qué sentimiento!
Gertrudis: el que tiene un buen poeta!



Me declaro adicta...O Jotabéfila. Cien por cien al Jotabé

Jotabejom)


Dicen, soy poeta adicta
es que mi pluma es estricta.

Al pareado enlazado
a su ritmo entremezclado,
a su cuerpo desmembrado
con su verso armonizado.

Hace un año lo probé
me hice adicta al jotabé.

Es que mi pluma es estricta,
con su verso armonizado
me hice adicta al jotabé.



Dios, familia, y poesía

(Jotabé con estrambote)


Tierna siempre es tu mano con tu arrullo,
y ese beso en la frente sólo tuyo.

Es frágil el suspiro que ennoblece
y mi voz que te reza y te enaltece.
Padre, sé justo mi alma lo merece
mis ansias escribí ¿Qué le parece?

Quiero a usted hacer una petición,
una simple, es tan solo mi obsesión.

Dios dame aprobación en el murmullo
sin mi familia nada me apetece
y mi palabra muere de aflicción.

Tu señal: Mi elección.
Poder acariciar grandes amores,
y quitar de mi mente, estos temores.



Déjame ir

(Jotabem)


¡Qué me voy!, ¡Ya me perdiste!
Nunca existí, no me viste.

¿Qué pretendes, que me quede?
Y todo lo que antecede.
El tiempo fue dura sede
de un amor que nunca puede.

Suelta, salte de mi vida,
que ya cerrará la herida.

De nada te arrepentiste,
ya hasta tu vista me agrede
dame paso, es mi partida.



Despedida al año viejo

(Jotabem espejo)


Cuando un año se termina
un anhelo en mí germina.

Un gran acontecimiento
hace del alma su intento,
sin ningún impedimento
pidiendo un deseo al viento.

Como cualquier fe de erratas,
borras todo y te arrebatas.

Enervas la adrenalina
del más amplio pensamiento
Como tiros por culatas.


¡Qué pena!, no te aclimatas
ni de un ínfimo momento,
y todo vuelve a la ruina.

Tantas angustias baratas
mientras el tiempo dilatas.

Quieres tú, vivir del cuento
sembrando en mí el descontento,
las horas, y su descuento
te digo adiós, y no miento...

Vamos cuenta...Ya camina
adelante rebobina.



Vengo a soltar...

(Jotabem espejo)


Vengo a aflojar la mochila
para sentirme tranquila.

No llevaré tanto peso
donde escondí cada beso.
Hoy pensaba, y les confieso
que mi verso sigue ileso.

Y al pedirle a las estrellas
descorché muchas botellas.

Quizás whisky, ron, tequila,
brindaré sin retroceso
para embriagar las querellas.


Brindaré donde atropellas
un lunático progreso,
si mi sombra, te encandila.

Y de aquellas tardes bellas,
borraré profundas huellas.

Y la mar en su deceso
pregonó: ¿Qué cosa es eso?...
Si el presente fue un proceso
que agonizó tu embeleso.

[···] la vida vuelve y titila
en la luz de mi pupila.



Fue aquel día...

(Jotabem monocorde)


Fue un día, de crudo invierno
Sin dudas momento tierno.

La ratona tejedora
es una gran trovadora.
Título de cantautora
y estirpe de soñadora.

Consta de su propia banda
ella la nombra Yolanda.

Y en su tiempo sempiterno
le canta a Ma Teodora
Y a su señor zarabanda.


¿Y qué apunta en su cuaderno
con ese aspecto materno?

Diseña un punto de otrora
para la gaviota Dora,
ésta gentil roedora
promete una cazadora.

Un suéter y una bufanda,
con puntadas de lavanda.

Porque en su arte postmoderno
y en su vida acogedora,
viste el verso de hopalanda.



Hormiguita laboriosa

(Jotabem tetrasílabo)


Va cansada
agotada.

Es Bernarda
que en la yarda
se resguarda.
No se tarda,

en verano
siempre a mano,

es osada,
pero guarda
grano a grano.



Juegos de roles

(Jotabem)


Trabajar un acto puro
donde aprendes, sé que es duro.

Aunque seas pequeñita
ves la imagen de mamita.
Sin saber la niña imita
disfruta siendo chiquita.

Esos, los juegos de roles
es luz de futuros soles.

En cada momento oscuro
siéntate y recapacita,
que tu ejemplo marca goles.



En coma

(Jotabem)


Se tuvo que reiniciar
no podía continuar.

Dejó de ser aplicado
y responder con agrado,
estuvo descontinuado
con su servicio anulado.

Y si sonaba algún tono
respondía su abandono.

Se volvió a resetear
sobre un marco muy cerrado
preguntándose:¿funciono?



Mi época

(Jotabejom monocorde)


Al remontarme al pasado
la niñez fue mi reinado.

El cantar de las tojosas
tristemente melodiosas.
Un ritual de mariposas
entre cactus, entre rosas.

Vi volar los saltamontes,
por aquellos verdes montes.

La niñez fue mi reinado
entre cactus, entre rosas,
por aquellos verdes montes.


A todos nos ha marcado
el tiempo civilizado...

De unas latas herrumbrosas
se hacían perfectas cosas.
Fueron huellas asombrosas
en épocas prodigiosas.

Que al pasado te remontes.
El futuro no confrontes.

El tiempo civilizado,
en épocas prodigiosas,
el futuro no confrontes.



Riña gatuna

(Jotabem espejo)


En esta noche de luna,
una trifulca gatuna.

Se alborotó el vecindario
dos curas y el funerario,
un galán bibliotecario,
un profe universitario.

Era que a la gata mía
un inculto la pedía.

Era un mizo con tontuna
indecente y victimario,
que a todo el mundo agredía.


Y sucede que ese día
el presunto millonario
maulló su vil pilatuna.

Y la mía no sabía,
que otro más la pretendía,

era un gato boticario
médico de un dispensario,
que tenía un gran salario
un ejemplo de vestuario.

Mía no quiso fortuna;
solo pargo, arenque, o tuna.



Fue en otoño

(Jotabejom)


Como un frágil cascarón
Él, rompió mi corazón.

Fue su sentir un vacío,
que abrumaba con hastío.
Llenando de blanco frío
aquel otoño baldío.

Y aquel querer inseguro
fue llanto, dolor impuro.

El rompió mi corazón,
aquel otoño baldío
fue llanto, dolor impuro.



Réquiem a los gallos de Mariano

(Jotabé decasílabo)


Un canto se fuga de su mano
apuesta en cada ave de Mariano.

Los tonos brillantes son redadas
óleos de juegos, marejadas.
el campo en sus tierras pinceladas,
y espuelas de gallos afiladas.

Época de escape en el fauvismo,
tránsito también al muralismo.

finura y certeza del cubano
esgrimista en buenas estocadas,
faro de costumbre y paisajismo.



De vacaciones

(Jotabé dodecasílabo)


Santa María, playa de azules aguas,
de espuma limpia y arena bajo paraguas.

Sin ínfulas tus dunas imitan monte,
el cielo mira, semeja un polizonte.
Puntos a crochet imitan al bisonte,
y en los cocoteros, vive algún sinsonte.

La maga brisa, despeina mi cabello,
y los pulmones festejan mi resuello.

Lindas las noches, vestidas de tataguas,
llenas de emociones en el horizonte,
todo es agradable, hiper sensible, bello...



Por amor o por temor

(Jotabem)


Tus tardes no fueran mías,
si tampoco son los días.

Sobre un noviembre recuerdo
que no hubo firma, ni acuerdo.
Largo trecho donde pierdo,
el dulce amargo que muerdo.

¡Por un amor... Por amor!
¿Cuántas horas de dolor?

Tanta espera evitarías
porque no es loco ni cuerdo,
quien se aísla por temor.



¿Viva la amistad?

Jotabé dodecasílabo


Vagas en las sombras, buscas compañía,
buscas insegura, con gran valentía.

Tú de ensimismada, sin jamás pedir,
quieres que te mimen, y te hagan sentir.
¿Qué esperas, qué esperan? no te van a herir,
no sólo te buscan, por así decir.

Ella selecciona, su punto de vista,
nunca hay tiempos malos, ni una larga lista.

No por casualidad, siempre en ti confía,
porque a un buen amigo no puedes fingir,
mejor sentimiento yo dudo que exista.



Canta la marimba, canta

(Jotabem monocorde)


Canta la marimba henchida
suena la madera erguida.

Y la marimba no aguanta
el sonido que asonanta.
Suena en su propia garganta
la acústica que le encanta.

Con marimbístico alelo,
tu ritmo se vuelve celo.

No pareces fallecida
al ser del mazo la Infanta
de su designio y desvelo.


En tu música aducida
me siento desfallecida,

y el pentagrama se espanta
si una nota lo suplanta.
Desde el altar, ella, santa
como Fénix se levanta.

De tu mística me encelo
porque a tu rima yo apelo.

Y el Jotabé cobra vida,
cuando la marimba canta
desde el mismísimo cielo.



Un canto al amor

(Jotabem espejo)


Quiero escribir un poema
un cantar, o hermoso lema.

Que defina que es amor
con entusiasmo y clamor.
Que lo aleje del dolor
y lo convierta en mejor.

Que no sepa de traiciones,
menos de desilusiones.

Que este ausente de dilema,
y nunca sea deudor
entre muchas acepciones.


Quiero escribir las razones
de un cantar y su esplendor,
ser reto en verbo y lexema.

Donde no hayan frustraciones
mucho menos distinciones.

Que no sea un desertor
ni repita el mismo error.
Quiero un canto abrumador
integro, pleno en valor.

Que brille como una gema
disímil, único, emblema.



Sólo mentías

(Jotabea Acróstico Doble Sérmico)


FORMABAS un diluvio CULPANDO la corriente
CON colosal orgullo MENTÍAS tú consciente.

PASIÓN insospechable MIENTRAS pecaminosas,
LOCURAS de la vida DESIGNIOS de las rosas
PASAJES peregrinos PREJUICIOS, tantas cosas
MENTIRAS de mentiras GRITABAS maliciosas.

ANSIABAS con reproches REGAÑOS sin alarde,
DEJANDO en antesala RASTROJOS ruin cobarde.

CON toques de locura NEGABAS mi presente
TU bendita tristeza PAMPLINAS misteriosas
DESAMOR en la luna FINGIMOS cada tarde.



Ati, poeta virtual

(Jotabem)


Allí muy lejos estás
Allá tan lejos te vas.

El wifi se hace camino
ser tácito es tu destino,
con magia y canto divino
actúas de celestino.

Como enlace natural
la Internet es magistral.

Aunque siempre quieres más,
lo nuevo se hace genuino
por ti poeta virtual.



¡Olé, olé por ti!

(Jotabé decasílabo acróstico)


Oigo los aplausos y los gritos,
los reclamos, sustos infinitos.

Elige el mantón, el garapullo
obedece el cuerpo con orgullo.
La arena para el toro es enfullo
el torero, una muleta, embullo.

Por qué das la espalda en ese instante,
olvidaste el toro va adelante.

Reto los minutos ya descritos...
tildan con silencio aquel murmullo,
imagine un hombre agonizante.



Amanecer

(Jotabem)


¡Qué simpática es la orquesta,
qué divina y sana fiesta!

¡Qué tantísima alegría
cuando siento asoma el día,
en mi vida, y su energía
es sol, es mar, es vigía!

Y sus espumas salobres
parecen ríos de cobres.

Siempre una nueva propuesta
para amarte poesía,
y echar mis versos en sobres.



Historias del carnaval

(3 Jotabem)


I

En las alas de caribe
festeja un pueblo se exhibe.

Al borde del malecón
el llamado vacilón,
con cerveza, o puro ron
se revive la pasión.

En los palcos luminosos
vecinos escandalosos,

y la gente lo recibe
con tantísima emoción
aunque parezcan latosos.


II

En las alas de un verano,
el carnaval del cubano.

Bailarinas y fantoches
colmando las tibias noches,
con lentejuelas y broches
carrozas, de antiguos coches.

La fiesta con sus bufones,
por las calles, los rincones.

Un guarachero reglano
baila tras los carricoches
agitando sus razones.


III

A esta fiesta universal
se le nombra carnaval.

Y la memoria lo llama
mucha gente lo reclama,
porque su pueblo lo aclama
pero ya no se programa.

Ese pedazo de esencia
dejó de ser existencia.

Como festejo al final
ausente se autoproclama
de tradición e inclemencia.



Muchas felicidades

(Jotabem)


¡Ay! Clemen eternamente,
hoy me dije urgentemente.

Hoy está de cumpleañera
esta grande jotabera.
Se hace querer por sincera
le brota el verso a la vera.

Te envío felicidades
de mi parte y de amistades.

y grito sinceramente:
¡Jotabea compañera
por el campo y las ciudades!



¿Por dónde, por dónde entró?

(Jotabem)


Me levanto en las mañanas
torpe, con sueño y sin ganas.

Voy del cuarto a la cocina
trajina que te trajina.
A poco, ni se imagina
dónde estaba la mangrina,

en el baño se coló
y buen susto que me dio.

Y en estás horas tempranas
¿Cómo saco a la asesina
que de espanto me mató?



El tiempo, ni amigo, ni fiel

(Jotabem)


Estoy buscando una clave
que encierre el tiempo, con llave,

que no hay quien pueda con él,
y no es amigo, ni es fiel...
Que empalaga como miel,
nos destroza cual papel.

Que corre, y no hay quien le empate.
y se vuelve disparate.

Que es la caricia más suave,
que nos rueda por la piel
y está loco de remate...



Mi confidente

(Jotabé)


Desciendes en la noche abrumadora,
y mi psiquis pausada te atesora.

Siempre tú en mis letras eres ayuna,
la espera que repara mi fortuna.
eres inspiración perlada luna,
voz que calma mi sed inoportuna.

Cada plazo que das es un dictamen,
de las noches no quieres te reclamen.

¿Cómo puedes sentirte pecadora?
con tu eco te me haces más lobuna
si te gusta y te seduce que te amen.



Si te da por emigrar

(Jotabé hexadecasílabo u octonario, con doble rima y estrambote)


¿Cuánto cuesta a los bolsillos, la boda de un emigrante?
No son simples bocadillos, son un montón y pa'lante.

Las ropas, los calcetines, el traje y sus atributos.
Aros que sean afines, oro, plata o sustitutos.
Pero suave, no alucines, por unos cuantos minutos...
Nada es eterno, no arruines, viene un cambio de estatutos.

La novia parece ansiosa, nueva vida a comenzar.
El ramo tira amistosa para poderse largar.

Unas caen de fondillos, otra con boca sangrante,
sobre duros adoquines, cocos, brujos y macutos
Así de mala es la cosa, si te da por emigrar.

¡Yo te invito a pasar!
En esas bodas cubanas, por amor o por placeres..
Y en esas nupcias tempranas, todas de blancos, ¡Mujeres!



Como Dios pintó a Perico

(Jotabejom monocorde)


Ya preparo condiciones
llegaron mis vacaciones.

Doy comienzo al ajetreo
compro, apunto, tacho, leo,
no tengo tiempo, o recreo
viajes, planes y conteo.

No sé bien, como te explico.
Nietos, hijos... ¡Ay! ¡Qué rico!

Llegaron mis vacaciones
viajes, planes y conteo,
Nietos, hijos... ¡Ay! ¡Qué rico!


Libreta de anotaciones
cerradas las deducciones.

Crédito en cero, ¡Qué feo!
listo el dólar pa' canjeo.
No quiero ningún bateo
para Cuba me voy y creo,

peso exacto, clasifico
como Dios pintó a Perico.

Cerradas las deducciones,
para Cuba me voy y creo:
¡Como Dios pintó a Perico!



Humanismo

(Jotabem hexasílabo)


Se pinta y retrata
de forma muy grata.

Perfecto en los ojos
tristezas y enojos,
llantos en remojos
aguados despojos.

Es puro mutismo
conceptual lirismo.

Se siente, se trata
captar en manojos
algo de humanismo.



Réquiem a los gallos de Mariano

(Jotabé decasílabo)


Un canto se fuga de su mano
apuesta en cada ave de Mariano.

Los tonos brillantes son redadas
óleos de juegos, marejadas.
el campo en sus tierras pinceladas,
y espuelas de gallos afiladas.

Época de escape en el fauvismo,
tránsito también al muralismo.

finura y certeza del cubano
esgrimista en buenas estocadas,
faro de costumbre y paisajismo.



Tu Inmortal Voz

(Jotabé)

homenaje póstumo al Príncipe de la canción


Tu genuina voz, mi José José
quedará impregnada en un jotabé.

Triste pasado, si vienes conmigo,
son cuarenta y veinte, años de testigo.
Créeme, que entre ella y yo, no consigo,
que fuiste bohemio, y yo no lo digo.

Nunca he renunciado a amar y querer
y esas lágrimas, ¿De quién puede ser?

Príncipe te vas y tu voz se fue,
hoy mi almohada llora y no prosigo
Así no es fácil, sin volverte a ver.



Mutación

(Jotabem)


Sólo con sabiduría
montó su lomo ese día.

Un caballo dislocado
traspasó de lado a lado,
aquel paisaje abrumado
de aquel jardín hechizado.

Un Centauro y su pasión
inundó la habitación.

Pero yo no comprendía,
después de haberme marchado
él sufrió una mutación.



La ventana

(Jotabé decasílabo)


El sol al cristal, ha traspasado,
dibuja un prisma casi en dorado.

Él, es un chicuelo comprensible,
un madrugador inconfundible.
Su abrazo caluroso e invencible,
del hombre sustento apetecible.

La ventana en la verja, es frontera,
pues me aleja de él y desespera.

El sol de ceño preocupado,
mi piel deja ardiente e irresistible,
y en mi mejilla, sabor a espera.



Extraña boda

(Jotabem)


Habían cien mariposas
de cortejo entre las rosas.

Una de ellas pretendía
casarse aquel mediodía.
una araña le decía:
¡Estás loca amiga mía!

¡Él es, de especie abejorro
le llaman, zorro cachorro!

Se oyen sonar melodiosas
las campanas ese día
el polen soplan por chorro.



Hoy

(Jotabé dodecasílabo)


La señorita luna con su desvelo,
al cuido de mis sueños, allá en el cielo.

Descansa concentrada pone atención,
entre sábanas blancas, lino y algodón.
Yo sé en su rostro, no hay preocupación,
Estoy con mi familia, sin distinción.

La señorita Luna está clareada,
en los rayos de su sol, ya es madrugada.

Ya tranquila sin distancia y sin recelo,
con regocijo plena en satisfacción.
Muestra su mejor cara, se siente amada.



Cráneo, con nombre y apellido

(Jotabé senryu)


Es un domingo; Turistas a la espera, ¡Qué sensación!
Unos a misas, otros al cura dicen, en confesión.

Las avenidas pobladas de entusiasmo todo espontáneo
Mientras la brisa, se ríe de tus olas Mediterráneo
lindos colores definen cada ángulo, pincel foráneo
entre figuras tejados y puntales nada cutáneo.

Pablo Picasso, rompe las teorías desde el cubismo
Dejando, lejos, estilos ya barrocos e impresionismo.

Enmarañados, cilindros perfumados con emoción.
mientras esquemas tal vez reminiscente rompen el cráneo
Son nuevos tiempos el arte y la pintura puro mitismo.



Lobos con piel de cordero

(Jotabem)


Lobos con piel de cordero
déjame tocar madero.

Escondido y silencioso
se pavonea lijoso,
pone al hígado mañoso
síntomas del envidioso.

No puede ni respirar
se desangra de alular,

presume de ser sincero
con semblante empalagoso
el mismo frustra su andar...



No es magro el bosque

(Jotabé senryu)


Por el sendero, rocío entre sus huellas ¿Habrá salida?
Le han olvidado, la noche es inquietante sin alma y vida.

La fe de erratas, postrada ante la pluma, letras con nudo.
Quizás no sepas, la lengua es una insignia, talar no pudo.
Extrañas sombras y voces espantosas, sonido rudo,
triste o sombrío reserva algún gigante, brilloso escudo.

vuelan insectos dejando asustadizo, ¿Venado o reno?
Mientras la noche refiere al magro bosque, como su
[ estreno.

Mueren despacio los ojos en silencio, negra bebida.
¿Serán verdugos los lazos de los genes, o berrinchudo?
En la arboleda, la desnudez eterna, nada esta ajeno.



Ella, cual musa de Erato

(Jotabem monocorde)


Da Vinci mira... Se fue,
con la Gioconda que ve.

En su mirada extraviada
retoca una pincelada,
y en su sonrisa acerada
deja el alma enamorada,

sobre el lienzo sin contrato
deja un perfil esfumato.

Es bien sabido, no sé
que en una tabla pintada
resguardó su anonimato.


Desde el mismo Louvre de...
París, pinto en jotabé.

Los ojos, de una estocada,
de profundidad sellada,
de persecución marcada,
de malicia dibujada.

Y al mirarle a cada rato
tengo presente el recato.

Pues dondequiera que esté
me persigue su mirada
Ídem mi musa de Erato.



Romance nocturno

(Jotabé 5-7-5)


Hojas perfectas teñidas por la noche de azul intenso,
cantaba un grillo su conocida estrofa todo indefenso.

Las golondrinas, se cruzan con el viento sobre el nogal,
se que han nacido retoños clandestinos, todo al final.
Por cada rama se endulza cada fruto, con madrigal.
la transparencia del cielo es infinito, savia otoñal.

Húmedas notas lenguaje de las hierbas, en remolino.
vuela un secreto desconsoladamente, tejido fino.

La Luna besa la sombra sumergida, que va en ascenso.
Cuantos te miran princesa enamorada, ninfa ideal,
tañen gorriones al translúcido espacio, todo mohíno.



Y mientras tanto...

(Jotabé dodecasílabo)


Mientras la selva arde, grita la llanura,
y mueren animales en la espesura.

y mientras nada pasa, se abre una brecha,
se expande por la atmósfera y a ti pertrecha...
De gases iracundos como una fecha,
tus bronquios y pulmones, el humo acecha.

señales por el cielo hasta el firmamento,
el hombre es inconsciente de este momento.

Hoy miro con tristeza tanta amargura
Y todo ya fue escrito sobre una endecha
son cantos de los dioses, su advenimiento.



Quiero robarle a la tarde

(Jotabem con estrambobe)


Quiero robarle a la tarde
sus guiños rojos de alarde.

Quiero que la noche llegue
y que el sueño se despliegue,
sobre el lecho en que navegue
Don Morfeo me sosiegue,

y a causa de mis desvelos
mueran los tantos recelos.

Batallador y cobarde
más imposible reniegue:
¡Hay celos, malditos celos!

Son anhelos,
y quiera Dios me resguarde
de ese sentir tan cobarde.



Felicitaciones por sus bodas de perlas

(Joatabem)

A Juan Benito y Ana por su 30 Aniversario de boda

¿Dónde fueron a buscar
la perla para fundar?

Este hermoso matrimonio
donde el tiempo es testimonio,
del suave y tierno favonio
a este eventual patrimonio.

Es el treinta aniversario
un rosal de itinerario.

Ana teje sobre el mar
con puntos color limonio
la rima de un legendario.

Perla y erario
y champán para brindar
los versos del buen amar.