Amor entre el vencejo y la golondrina albina

(2 Jotabé)


Golondrina albina alegre gorjeas,
Golondrina albina que chapoteas,

Riesgo de pecar de ponderamiento
Siento al ver tu ágil desenvolvimiento.
Quizás tendría que tener más tiento
Y contener mi audaz atrevimiento.

Del amor pocos conocen la ciencia
Permitidme, amada mía, licencia.

Simplemente observar cómo aleteas,
Produce en mí desazón y no miento
Al decir que siento pura impaciencia.


Y ¿qué os trae por aquí, señor vencejo?
Pues sabed, no hace falta catalejo.

De remotas tierras y valles vengo
Y el único propósito que tengo
Es perpetuar soberano abolengo
Y real linaje del que provengo.

En asuntos de amor no es sinrazón
Seguir los impulsos del corazón.

Heme aquí que en el empeño no cejo
Y mi más firme voluntad mantengo
De avivar el fuego, la quemazón.