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ARTÍCULO 389

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¡MARE DE DEU DELS DESAMPARATS!

 

 
 

El segundo domingo de mayo, que en este 2021 se corresponde a hoy domingo día 9, habitualmente se celebran los actos en honor a la Virgen de los Desamparados, cuyo nombre completo sería Nuestra Señora la Virgen de los Inocentes, Mártires y Desamparados.

Haciendo un poco de historia comentaré que, para esta bella advocación mariana tan querida en Valencia, el Consell (Consejo) de la ciudad del Turia, el 24 de enero de 1789, pidió que le fueran otorgados honores militares, reiterándose la petición el 25 de mayo de 1809 y, finalmente en 1810, el 6 de marzo, la máxima autoridad de Valencia en ese momento, el Capitán General de Valencia Pedro Caro y Sureda (1761-1811), solicitó al Arzobispo de Valencia, Joaquín Company y Soler (1732-1813) que, como muestra de gratitud por haber ganado la Primera Batalla de Valencia a los franceses que tuvo lugar el 28 de junio de 1808, le permitiera nombrar a la Virgen de los Desamparados «Generalísima de los Ejércitos». La petición le fue concedida y la misma se realizó en acto solemne en la Catedral de Valencia, donde el General Caro le impuso a la Virgen de los Desamparados el fajín de General y le entregó el Bastón de mando.

Además, la Virgen de los Desamparados cuenta también con el título de Alcaldesa Perpetua de Valencia.

Pero quizá lo más importante sea que, el Papa León XIII (1810-1903) mediante bula papal del 2 de abril de 1885 le concedió ser la Patrona de la Ciudad de Valencia.

A nuestra querida Virgen de los Desamparados, (Mare de Deu dels Desamparats, en valenciano), cariñosamente sus fieles la llamamos «Geperudeta» («Jorobadita»), por la posición que adopta su cabeza o, bien «Mareta» («Madrecita»), pues la Virgen de los Desamparados es la madre de todos los valencianos,
Nuestra querida «Geperudeta», a pesar de todos los honores recibidos, tenía aún a principios del siglo XX pendiente algo importante, pues no estaba coronada canónicamente. Pero a esto le puso remedio el Arzobispo de Valencia, el Cardenal Enrique Reig Casanova (1858-1927), pues fue quien impulsó la coronación de la Virgen, hasta que, finalmente el Papa Benedicto XV (1854-1922) el 15 de octubre de 1921, le concedió a la Virgen de los Desamparados el privilegio de su Coronación, teniendo esta lugar el 12 de mayo de 1923 el acto solemne en el Puente del Real. Es preceptivo apuntar que el acto estuvo presidido por el rey Alfonso XIII de España (1886-1941) llamado «el Africano».

Mas, centrándome en los actos del día grande de la Patrona de Valencia, he de comentar que, en el día de su fiesta mayor se realizan multitud de actos desde muy temprano.
Así a las 05:00 horas de la madrugada del segundo domingo de mayo, se realiza la llamada «Missa de Descoberta» («Misa de Descubierta»). Con esta misa se quiere rememorar aquellos tiempos pretéritos en que en Valencia se levantaban los trabajadores del campo para iniciar su jornada laboral.

A las 08:00 horas se celebra la «Missa d’Infants» («Misa de Infantes»), en la que desde 1957 canta la Coral Infantil Juan Bautista Comes acompañada de la Orquesta Sinfónica del Conservatorio Municipal José Iturbi de Valencia.

A las 10:30 horas se realiza el «Traslado de la Virgen», el cual aun a pesar de tener un trayecto corto en extremo, tan sólo desde la Real Basílica de Nuestra Señora la Virgen de los Desamparados hasta la Catedral Metropolitana de Santa María de Valencia, apenas unos tres minutos andando en un día normal, en un domingo como hoy se extiende bastante en el tiempo y es sumamente emotivo; las lágrimas afloran en los rostros; los ¡Viva la Geperudeta!, ¡Viva la Mare de Deu!, los aplausos y las ganas de tocar a la virgen hace que ese precioso trayecto se llene de fe, esperanza, ilusión, alegría, emoción, amor…

Los niños, literalmente, vuelan por encima de las cabezas de los adultos, los cuales, con sus manos ayudan a que los críos lleguen a poder tocar e incluso besar el manto de la Virgen. ¡Realmente un acto de fe que pone los pelos de punta! Pues todo esto está acompañado por numerosos poemas y alguna canción en honor de la Geperudeta que le dedican multitud de fieles con la voz sumida en pura emoción.

En ese momento del traslado, se suele decir que «La Virgen es del pueblo».

Al acabar el traslado en la Catedral, a las 12:00 horas, y presidida por el Arzobispo de Valencia, que actualmente es don Antonio Cañizares Llovera (1945), se celebra la Misa Pontifical.

Y ya por la tarde, a las 19:00 horas, se celebra la «Provessó General» («Procesión General»), que recorre algunas calles de Valencia de uno de sus barrios más antiguos, el barrio del Carmen.

Realmente hay que vivir todos los actos y sentir en las carnes de uno mismo todo lo que un fiel que tiene a la Viren de los Desamparados, a la Mare de Deu en su corazón, puede sentir en ese momento.

Aunque en honor a la verdad he de decir que este año, de nuevo por temas de la pandemia tan sólo se celebrarán la Missa d’Infants y la Misa Pontifical.

También es preceptivo apuntar que la Virgen de los Desamparados, no sólo es la Patrona de Valencia, pues, en España también es la Patrona de las ciudades de Gandía, Ibi, Adzaneta de Albaida o el Campello, sino incluso fuera de las fronteras españolas. Así tenemos que en Argentina es la Patrona de las ciudades de Desamparados en Rivadavia y de Carhué en buenos Aires. En Costa Rica es Patrona de la ciudad de Desamparados, al sur de su capital, San José. En Chile en la Comuna de los Andes en la región de Valparaíso. Y, además, en diferentes lugares de Venezuela, Perú, Ecuador, El Salvador, México…

Y para concluir este entrañable artículo quiero hacerlo con un grito característico de amor y honor a la Geperudeta que gritamos los valencianos:

«Valencians, tots a una veu ¡Vixca la Mare de Deu!»

(«Valencianos, todos a una voz ¡Viva la Madre de Dios!»

Valencia es cultura, Valencia es fe.

 
 
 

Fuente:
El Periódico de Aquí

 
 
 
 
     
   
 
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