Ponencia de;

Marta María Requeiro Dueñas

Marta María Requeiro Dueñas (Miami Beach. Florida. Estados Unidos) Poeta cubana afincada en Estados Unidos creadora de dos variantes de la Rima Jotabé, y Embajadora de la Rima Jotabé en Estados Unidos.

La siempre fresca Rima Jotabé

El destino es el resultado de una mezcla de perseverancia y sorpresa, lo digo porque a principios del 2018, buscando por los sitios de Internet dedicados a concursos de poesía (perseverando en el intento de ganar alguno), en la página de Escritores.org, me topé con la convocatoria al VII Certamen Internacional de Poesía en Rima Jotabé que iba a celebrarse en Valencia, España. ¡Ahí quedé sorprendida…! “¿Rima Jotabé?”, me dije, y me di a la tarea de indagar de qué se trataba. Descargué la Documentación Formal de la misma, analicé y trabajé en esa nueva estructura poética que el destino ponía en mi camino, preparé unos poemas y los envié con algo de temor y duda al correo que destinaban para ese fin. Con infinita alegría el 10 de marzo recibí un e-mail del creador de la Rima Jotabé, el excelentísimo señor Juan Benito Rodríguez Manzanares, informándome que uno de los poemas que yo había enviado había resultado finalista en dicho certamen. Desde ese entonces mi vida cambió. En abril del 2018 con la venia del profesor Juan Benito se crea el grupo Jotabeando que reúne a los poetas y seguidores de este arte de hacer poesía.

Día a día sacio mi sed de versar, en la fuente de agua fresca e inagotable que resulta ser la Rima Jotabé. Esta estructura neoclásica ha llegado a convertirse en una adorable adicción de la que no quiero curarme. Jotabeo a toda hora del día, mi mente trabaja sola. Me surge un verso e inmediatamente busco la manera de formar con él un pareado, luego ya estoy pensando en el cuarteto monorrimo, segundo peldaño de dicha estructura que para los pocos remisos a intentar usarla que he hallado es “una roca dura de roer". Sin embargo, para mí se convierte en una herramienta potente que puede resultar muy provechosa. Esta estrofa dentro de la contextura de la Rima Jotabé ofrece la posibilidad de dar énfasis al tema que se quiera tratar en el poema, puede despertar exaltación, embellece. Con estos cuatro versos se puede alcanzar la cúspide emotiva de la pieza poética si es usada eficazmente por el vate para lograr mayor sensibilidad en el receptor: ya sea si se lee o se escucha. Luego, sin pretenderlo, elaboro la tercera estrofa que es el segundo pareado y para calma de mi alma y sosiego de mi espíritu me doy cuenta que solo falta tejer con arte, y la dosis de belleza calculada y procurada, el terzo: esos tres versos finales que, si logran empalmar perfectamente con las tres estrofas anteriores del poema otorga a este el cierre inmaculado que luce como un elegante broche de oro.

Justamente es el terzo el del aspecto más novedoso dentro de un Jotabé. El que, con voz propia, desde sus características peculiares, me reta como poetisa, me insta a esmerarme y lograr un final sorprendente sin que se sienta forzado, «pegado», de manera burda tras las tres estrofas anteriores que sí tienen versos consecutivos con los que rimar. A pesar de verse a simple vista como tres versos sueltos o libres, tiene que lograr pertenecer de forma refinada al poema. Cuando logro esto, una vez puesto el punto final tras el onceavo verso, me invade un placer y, siendo honesta, un poco de orgullo se instala en mí, me siento vencedora. Mas con prontitud recapacito y comprendo que es todo lo contrario: es la Rima Jotabé la que me gana nuevamente, me seduce, me conquista una vez más: ¡me vence…! Y rendida a sus pies, atraída por su supuesta sencillez, me veo de inmediato construyendo un nuevo jotabé y razono sobre la dependencia que voy teniendo de esta forma de hacer poesía. Desde entonces abogo por la novedosa estructura de componer poemas estróficos que me ha subyugado: La siempre fresca Rima Jotabé. He aprendido mucho por el apego a ella y gracias a la paciencia del Sr. Juan Benito que se ha convertido en mi mentor.

A través de la Rima Jotabé siento que he llegado a ser mejor poeta, aunque me falta muchísimo por aprender para intentar realizar poemas en las variantes más complejas que tienen atisbo de ciencia. Tuve la inmensa dicha de ganar, en junio del 2018, el 1er lugar del Concurso Internacional de Poesía El Mundo Suena en Jotabé, que anualmente se celebra en Ecuador, con el jotabejo dodecasílabo Átame a tu mano.

En junio del mismo año obtuve el 1er lugar del Concurso Internacional de Poesía Purullena Suena en Jotabé, con un jotabeim en forma de cuento para niños, titulado La boda del grillo y en diciembre me otorgaron el Primer Premio en el VIII Certamen Poético Internacional en Rima Jotabé, con el Jotabé hexadecasílabo u octonario El niño y la luna.

En agradecimiento al creador de esta estructura neoclásica y con el objetivo de introducir la misma entre los poetas de EEUU, a partir de noviembre del 2018 y hasta enero del 2019 creé, convoqué y se llevó a cabo con un éxito impresionante, con más de doscientas cuarenta obras participantes, el Primer Concurso Internacional de Poesía en Rima Jotabé Jotabeando USA.

La Rima Jotabé, sin duda, también me ha hecho mejor persona, desde que se creara el grupo Jotabeando en Facebook y desde que el Sr. Juan Benito me nombrara Embajadora de la Rima Jotabé en EEUU mi compromiso con la Rima Jotabé ha ido aumentando, trato a diario de que muchos más poetas la practiquen, y esto ha hecho posible que hoy tenga amigos que nunca hubiera imaginado tener en diferentes y recónditos lugares del planeta y lo más hermoso es que esa amistad se sustenta, más allá de las ideologías, clases sociales y barreras idiomáticas, en la Rima Jotabé. Con ella, con los jotaberos, he aprendido a ser más tolerante y comprender que la Rima Jotabé se ha convertido en una forma de expresión y de unión para los poetas del orbe y que ha llegado, para gloria del mundo poético, para quedarse.