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Directorio de poetas que escriben en Rima Jotabé



Rima Jotabé



Directorio de poetas que escriben en Rima Jotabé en lenguas diferentes al Español

Directorio de Poetas que escriben en rima Jotabé en español
 
 
GLORIA RÍOS AYZÚ
 
Poemas
 
Gloria Ríos Ayzú

Gloria
Ríos Ayzú

(Kokul'al Quetzalcóatl)

México

Al hombre en tiempos de guerra

(Jotabé)


En la historia siempre destaca el hombre
valiente, sin mencionar algún nombre.

Nadie es perfecto, pero si es perfecto
luchar por ideas (o algún proyecto).
Es notable; la estima propia, afecto
hacia los demás y a lo que es correcto.

Felicito al hombre que no ha truncado
las alas y, aunque, haya sido olvidado,

su ser vivirá ¡Que no nos asombre!,
por sus haceres y por su intelecto,
por ser el padre, hijo, hermano o soldado.



Flor y canto


(Jotabé)


Suena una melodía, una canción,
es un canto alegre y de exaltación.

Mariposas vuelan cuando el candor
de mis alas desprenden el vapor
del grial, que al subliminar, son amor,
son soles en su máximo esplendor.

En mi árbol vital yo suelo cantar,
cantarle a la flor en mi despertar.

Flor y canto es jardín, consumación,
música del cielo en el traductor
del cosmos que me invita a celebrar.



Collar de perlas y espuma


(Jotabea con doble rima)

a Alfonsina Storni


Es complejo entender el alma de un poeta
en alma de mujer, que escribió su silueta.

En una noche oscura sintió a la luna y al mar
de octubre, su cordura la llevó hacia un collar
de algas, surgió la cura del dolor del pesar,
cual rizo de dulzura, para así descansar.

…Y sus rizos dorados al Mar del Plata amaron;
sueños cristalizados que en la muerte giraron.

El Fénix al arder exhibe la careta,
la espuma y la blancura de su alma en un telar
de destinos cruzados, que en perlas se labraron.



Amigo libro


(Jotabé)


En los libros buscas información
que saboreas como colación.

Mas en ellos encuentras las estrellas
que esclarecen en las noches más bellas,
iluminando a las lunas, aquellas
misteriosas que despiden centellas.

Como un rayo es energía vital,
rosa que crece del nuevo rosal.

Te acompaña siempre en toda ocasión
si necesitas paz y no querellas;
entretiene de manera cordial.



Los puros


(Jotabem jitanjáfora)


En la pureza del agua
la azul cadena se fragua.

Por la umbra nadan los puros,
comen moscos sin apuros;
tienen dientes algo duros,
en el río están seguros.

En los fangos ellos mullen,
saltan cuando se escabullen.

Triste es cuando se desagua
el estanque: en los oscuros
lodazales se zambullen.



Tu legado


(Jotabé)


Fue novelista, ensayista y poeta,
en el modernismo ungió la saeta.

También fue embajador y periodista,
colaboró en la célebre Revista
Azul. Su obra se amolda a lo marista,
pues tiene una mística que es bien vista.

Oh, ¡mi Amado Nervo!, cual perlas negras
el corazón y tu cantar alegras.

Resaltas del féretro la careta,
en vida y muerte tu pluma de artista,
en tu legado el útero que integras.



Por la paz


(Jotabem)


Unamos todos las manos
no nos sintamos lejanos.

Que sea la flor fragancia
del cielo de nuestra infancia,
la que una por concordancia,
la que huela a tolerancia.

Que en la Tierra reine paz
con democracia eficaz.

Seamos todos hermanos,
la utopía la jactancia,
aunque hoy nos suene falaz.



Soldado y bardo


(Jotabejoa)


Contra la dictadura fue soldado de España,
diestro poeta, altivo, como una gran montaña.

Su poesía es arte, combatiente elegía,
en la cárcel fue amparo cual tiene una armería.
Al terminar la guerra, por su ideología
fiel al Nacionalismo, brotó la rebeldía…

Y del árbol talado retoñó el feroz bardo,
de la cebolla nanas, del estiércol el cardo.

Diestro poeta, altivo, como una gran montaña,
fiel al Nacionalismo brotó la rebeldía,
de la cebolla nanas, del estiércol el cardo.



El Naranjo


(Jotabé)


México tiene lugares hermosos,
por lo que muchos regresan gustosos.

A la región de «El Naranjo» viajé,
de su gran cascada me enamoré;
a sus helechos y al verde elogié,
al «Palo de rosa» fotografié.

Corren sus aguas frescas por el río
color de turquesa y lleno de brío.

Al verde y al azul fundí como esposos;
en mi memoria siempre guardaré
lo fascinante de su señorío.



La flor original


(Jotabé)


Veo cosas en la naturaleza,
magia y belleza con toda certeza.

Un ecosistema único en su tipo
que sustenta y mantiene el fenotipo;
el hogar es de especies, un equipo,
que guía una flor, en su prototipo.

La gente ha generado una fractura
y está modificando la natura.

Llegó la hora de sacar la cabeza,
por la Tierra y por todo aquel biotipo,
ser parte del equipo en su hermosura.



El mudra del caracol


(Jotabé Vereal dodecasílabo)


Es de color verde, como el nopalito,
mi caracolito, mi caracolito.

Sigiloso subió y tomó el sombrerillo
del hongo blanco apodado «El Angelillo».
Parecía dulce como panecillo.
¡Cuidado chiquillo, cuidado chiquillo!

En la oscuridad se oculta la trampilla
de su cobijilla, de su cobijilla.

¡Ay!, no mires tan solo por el rabito,
¡carajo!, no veas lo que el hombrecillo,
tú usa la casilla, tú usa la casilla.



Honrar a la imagen


(Jotabé dodecasílabo)


Yo soy testigo de la autodestrucción
del hombre desbocado en el aluvión.

Guijarro sin rumbo fijo en ceguedad,
que teniendo espejo, la profundidad
de su mirada evita; banalidad,
sí, lo banal es sólo su potestad.

La vida es algo más que llenar abismos
que nunca se llenan, provocando sismos.

Fracturas que requieren de curación,
tan profunda como lo es la falsedad.
Soy feliz al liberarme de espejismos.



Grandes Vigías


(Jotabé tridecasílabo, heterostiquios 6-7)


Valencia; eres tierra de sustancial cultura,
en tus monumentos de gran arte y montura,

En tus edificios históricos, gloriosos,
está el hotel Bali; castillos victoriosos
como el de Peñíscola, por templarios colosos,
o el de San Fernando, como bienes grandiosos.

¿¡Qué del Miguelete, la Lonja de la Seda
y La Bella Lola, que dulcemente hospeda

a los marineros!? ¿Y qué del rey de altura
el Tombatossals? Ensalzan a orgullosos
valencianos, para que nadie los transgreda.



El poder del sol


(Jotabem)


Del agua azul el Señor,
de la vida el traductor.

Verás el sol en Oriente,
en él viaja la simiente,
el semen, sustancia, mente,
cubierta de luna, el puente.

Un mar de plata, un espejo
verás, antes del bosquejo.

Salvará alas del dolor,
cual milagro de la fuente,
ha de despojar lo viejo.



Unción


(Jotabé tetradecasílabo con heterostiquios 6-8)


Primero son tres, luego siete los vitales
templos de colores, arcanos primaverales.

Pero tres son uno; trinidad, emanación.
Pero antes el alfa, la omega; círculo, unión,
respiración madre-padre, flor del corazón,
un sol, una esfera de sentimental canción,

de Adán la costilla; dualidad y antagonismo.
Vivir en la nada conduce al oscuro abismo,

morir en el todo descorre los diez vitrales
del árbol, sensor de vida, de muerte; un don
para ser unción, verdadero mutualismo.



Sincrodestino


(Jotabé)


Hay un puente, entre lo llamado clásico
del pasado, al presente neoclásico.

La Rima Jotabé sin duda alguna,
llega con la pluma de la fortuna.
Envuelta en misterio como una luna,
bañada la musa en mágica runa.

Juan Benito, el poeta creador,
es al que homenajeo con fervor.

Es innovador, el idiosincrásico
valenciano, por cuanto la oportuna
reina-rima seduce al escritor.



Una paz sin guerras


(Jotabé)


Está situada mi fe, mi esperanza,
en el horizonte de la balanza.

Como un Pegaso, un veloz sol, de Oriente
vendrá, para en luz montarnos, urgente
de revelar la verdad a la gente;
neblinas despejará, por un puente.

Un puente, que paz traerá a la Tierra,
niños sonreirán; un ciclo se cierra.

Salta la esperanza en la nueva danza
de paz, por la claridad en la mente
de hombres libres, que detestan la guerra.



Por la paz… nunca he de dividir

(Jotabé Lauro Arriba)


I

Imparcialidad requiere este mundo,
como la madriguera lo profundo.

Conciencia-luz, desde la oscuridad,
es tolerar nuestra diversidad,
ir separando la banalidad
que conduce a la irritabilidad.

Aceptar opiniones con mesura
permite no caer en la locura.

Locura que te lleva al inframundo,
reflejada en la febril voluntad,
en una ácida lluvia de amargura.


II

Los pueblos van perdiendo libertad,
por actos que atraen polaridad.

Imán de poder; usan la censura,
nos consideran una miniatura,
un poni que perdido en la llanura
se alimenta de insípida pastura.

Sólo basta morir en el trasmundo,
para así vivir el abismo inmundo.

Se crea miseria y desigualdad,
encajando muy bien en la hendidura
de un eclipsado pueblo, moribundo.


III

Disfrutan ver la sangrienta fractura,
crean y divulgan la subcultura.

Y por el ocaso nauseabundo,
con el ánima herida me confundo.
Derramo cordura por un segundo
y las cadenas de la paz difundo.

Muero y surjo de mi fragilidad,
procurando vivir en hermandad.

Por la paz he de cerrar la cisura
y sanar el latido del submundo.
¡Urgente es un llamado a la Unidad!


(Jotabé Finalista del XI Certamen Poético Internaional Rima Jotabé)



El águila devora a la serpiente


(Jotabem)


El gran otoño partió.
En el árbol floreció.

México surge florido,
sin follaje corrompido,
toma el origen, el nido,
la rama tiene sentido.

La máxima es libertad,
fortaleza de beldad.

La mayoría apiló
verdad, que se ha digerido:
¡Plebiscito es unidad!



Desde el centro del corazón

(Jotabé)


Si Yo, al dios rayo pidiera un deseo,
luz imploraría, por lo que creo.

Que al sacudirme el ensueño del sol,
el céfiro del dorado crisol
inunde y refresque, como mentol,
con tonos rojizos el arrebol.

!Que mi sol salga por las cuatro esquinas!,
gire en cruz ganzúa, como turbinas.

Que cierre la noche en el aleteo
y sea mi corazón un farol
hacia la paz, erigiendo las ruinas.



Donde la luna es el sol


(Jotabé)


La noche azul se engarza con diamantes,
cuando nace el amor en los amantes.

Con la mirada lejana en el cielo
surco el peldaño que hoy, por fin revelo.
La noche se aclara cuando desvelo
lo que hay detrás del majestuoso ocelo.

Luz inmensa, llamarada de amor,
la luna-deva es genuino candor.

Las noches son blancos días, brillantes
amaneceres; cuando cae el velo
mi deva es la luz del sol interior.



En la penumbra


(Jotabé Cúver)


Ahora vas por el mismo camino
aquel que nunca «jamás» adoctrino.

Vives en la oscuridad, miras luces
ficticias, que deslumbran y traduces
como ciertas, luego te hundes; reduces
tu superación mirando en trasluces.

Sin luz propia, no encontrarás la vía
escrita en el mapa, pintando el día.

Es necesario que germine el vino,
que aflore la buena uva de las cruces
y crucificar la semilla impía.


Ahora vas por el mismo sendero
del archipiélago en el aguacero.

Vives en la oscuridad, miras faros
en la tempestad, pero los mamparos
se derrumban al no mirar los claros
rumbos; para ti intangibles y raros.

Sin luz propia, no encontrarás la norma
que haga que la sustancia tome forma.

Es necesario que germine el «cero»
entrelazando círculos como aros
de libertad, que todo lo transforma.



La llama de la fe


(Jotabem Rivol)


Ante la vida sonrío
a pesar de lo sombrío.

Son los tiempos sin fortuna
a pesar de la vacuna;
sin la caridad hay hambruna,
sin esperanza no hay una

llama que encienda la fe.
Y por eso pariré

el más valeroso crío
transmutando negra luna
en oros, y triunfaré.



Fiel y verdadero


(Jotabé)


Se respiran aires de Navidad,
sueltan bríos en mi divinidad.

Desde el pesebre, se trasmina paz
en la desnudez, sin ningún disfraz.
Las llamas en el tiempo de solaz
estacional, son concierto tenaz.

Campanas celestes y cascabeles
abren portales a verdes vergeles.

Mi alma luce alumbrada en la Unidad,
se abre al sol como el ilustre alcatraz,
que con gracia despide aromas fieles.



Cual semen de los dioses


(Jotabé Anverbo)


Trece lunas; éxodos de la noche,
arreboles en primoroso broche

de plata; fugaz perfume de estrellas
del glorioso cenit azul, de bellas
mieles, como millares de grosellas
en el cosmos vespertino; doncellas

de terso terciopelo en la pureza
de la más noble y versátil proeza;

rubíes, fulgores en el trasnoche
de desvelos inusitados; huellas
de ayer y de hoy, en abundante riqueza.



Seductora


(Jotabé)


Viste la luna con su traje místico,
a mediodía, sin un sol sofístico.

Luz blanca, tenue, pero siempre bella;
la luna mágica, como centella,
luce radiante, siendo la doncella
de cuentos de duendes, donde resuella.

Abre fronteras, universos rojos,
se dicen mágicos, abren los ojos.

Gran maga, diestra del baúl artístico;
imperio poderoso que no mella,
mas sí suma conciencia, más sonrojos.



La caza del rey


(Jotabé 5,7,5)


Llena la luna de sangre, la luz llega con nuevos bríos.
El cazador está atento y recibe luz de rocíos

de los destellos en forma de racimos, y que hasta el día,
los haces laten, como ataviando al sol de mediodía.
Al descorrer la sustancia del sueño, la fantasía
despierta en flor; las noches encantadas son ambrosía.

Para el Señor de la aurora lo es todo, cual resplandor
el horizonte cubre con sus cobrizos al exterior.

Como regente, descubre los rincones que están sombríos
en la terrestre faz, y al iluminar hay cacería:
la presa cae por el cazador rayo libertador.



Amigo fiel


(Jotabé)


La amistad es un ave de colores
que encaja bien en los grandes amores.

Despliega sus alas en libertad,
llena vacíos con fraternidad.
El Ser necesita de una igualdad
y en sus iguales encuentra equidad.

Un guerrero arcoíris es amigo
fiel, verdadero; aleja al enemigo.

El amigo aparta aquellos dolores
que vienen por falta de voluntad.
Los miedos aleja, estando contigo.



Ave de paz y libertad


(Jotabejoa)


Libre como gaviota, mujer en son de paz,
del cielo y mar soy un ave, de la tierra, feraz.

Me alejo de tormentas y cuando sale el sol,
planeo con mis alas, anunciando el crisol.
Me fundo con la nube rojiza y tornasol,
mi luz se expande como guía, como un farol.

Soy mujer, soy sagrada; con la sabiduría
poseo el don del vuelo, que altivo asumiría.

Del cielo y mar soy un ave, de la tierra, feraz.
Mi luz se expande como guía, como un farol.
Poseo el don del vuelo, que altivo asumiría.



Luna de fresa en el tiempo espiral


(Jotabé)


Dime mi amor, si en las noches la luna
brilla en tu corazón como fortuna.

Dime si la luna viste de sol
cuando juntos están, jugando el rol
del áureo amor, cuando son crisol
en el reloj que gira en caracol.

Las agujas apuntan igualdad.
A la hora doce, en lumbre la oquedad.

Dime si en el equinoccio, la Triuna
llama enciende el tic tac del arrebol
de nuestras almas, en la inmensidad.



El quetzal


(Jotabé dodecasílabo)


Pájaro de plumas bellas, tricolor,
tu belleza aludo desde el mirador.

Pequeño eres, grande también; unificas
en tu larga pluma perfumes de ricas
fragancias que sueles soltar; clarificas
pensamientos libres, cual luz que edificas.

Para mis ancestros, ave eres de paz,
representas mente, la chispa vivaz.

Soberana vuelas, llevas en la flor
el libre albedrío que aún glorificas,
en el hombre cuya sentencia es veraz.



Perlas con alas


(Jotabem)


Cómo el águila que asciende
y una nueva vida emprende;

un café y mi celular
me inspiran para soltar
la nota bella, encontrar
la pluma íntima y volar.

Renovando mi canción
he recibo el galardón...,

el ave de fuego enciende
luz que exalta mi perlar
de sublime inspiración.

(«He recibo» Licencia poética)



La Tierra al revés


(Jotabé)


Un árbol verde y frondoso se centra
en la cima, majestuoso se encuentra.

Queda rodeado de juguetonas
nubes diáfanas, que imitan las zonas
de campiñas sembradas con coronas.
Sobresalen sus hojas respingonas.

Parece no inmutarse por el tiempo,
estar bien robusto es su pasatiempo.

Lejos, la muchedumbre se concentra.
La guerra y la muerte son campeonas,
viajan por el mundo sin contratiempo.



Fragilidad


(Jotabé eneasílabo)


Siempre es bueno, en la despedida,
lánguido olvido en gran medida;

si el orgullo al amor supera
y es tan fuerte como la higuera,
enarbolar otra bandera
es mejor que romper la acera.

¿De qué sirve estar en cortejo
si no ha de aceptar el consejo?

Cura la apostema en la herida
y evita ser la cruenta fiera.
Del ser sólo queda el hollejo.



Templanza


(Jotabé)


Hoy sé que es un buen día para amar,
contenta, alzar los brazos y volar.

La sombra del impío no me asusta,
y aunque la vida me parezca injusta,
la venganza, el encono, no se ajusta
a mi ser, donde la paz es robusta.

Entra el canto del sol por mi ventana
y siempre es de día, la luz me sana.

Códigos acompañan; al andar
el alma se templa con luz. ¡Me gusta
levantarme y sentirme más humana!



Plenitud


(Jotabea)


Se mantiene la rosa púrpura reluciente,
como el granate, siempre se muestra refulgente.

Su llanto de rocío, cristales del sereno
que forman los diamantes del iris, con que lleno
un cosmos de palabras para sentirme pleno
y separar lo malo, distinguiendo lo bueno.

La vida es bella rosa, del saber milenaria,
sabiamente florece para ser libertaria.

El cristal es bagaje que está en la linda gente,
la lágrima del Fénix en rosa que oxigeno.
Desde arriba las gotas se agrupan en plenaria.



El grito de Dolores


(Jotabé Numérico)


El quince de septiembre la insurgencia,
y doscientos años de independencia,

festejamos ciento veinte millones
de mexicanos; con seis billetones
(seiscientos pesos, otros con billones),
cantaremos cuarenta o más canciones;

una o dos por cada héroe caído,
tres viva México, el grito aguerrido;

cinco tequilas pa' la convivencia,
cuatro guisados pa' los comIlones,
diez extras, por mariachi bienvenido.



Alas de bardo


(Jotabem)


El monumento del cielo
deja luz como riachuelo.

Entre estelas luminosas
un ave descubre rosas,
cruza el corazón de hermosas
flores; lunas misteriosas.

Al abanico del mundo
llegan, a lo más profundo.

En espejos va el anhelo.
Melodías de amorosas
liras preñan el segundo.



Aguas cósmicas


(Jotabemo Rimispal)


1

La justicia cósmica es mi mentora,
la vida es una y solo una aquí, ahora.

Me ilusionan cascadas diamantinas
que corren intrépidas tras colinas,
parecen anunciar leyes divinas,
con su peine disipan las neblinas.

Es majestuoso el árbol de la vida
que está enraizado a la tierra florida.

Festeja la divinidad que mora,
recibiendo de estrellas danzarinas
esa luz que viene a vibrar ungida.


2

La fluidez índigo de mi mentora
se vive y se percibe en el ahora.

Como en la mar las olas diamantinas
se vislumbran mejor desde colinas;
en la unidad surgen aguas divinas
que alejan por completo las neblinas.

Un vaivén de encantos está en la vida
cuando mantienen la tierra florida.

En su círculo el anciano árbol mora;
arriba y abajo aguas hoy, danzarinas,
llegan gustosas a la tierra ungida.



El día del sol


(Jotabé dodecasílabo con heterostiquios 7-5)


Los jugosos duraznos han madurado.
¡Desde mi alma se extiende mi canto izado!

Los sinsontes salieron recién del nido,
libertad en sus trinos, luz en sonido,
alegran la mañana como un toquido.
¡El día del Sol ha llegado ungido!

Un aire caluroso despierta días
largos que en vacaciones son melodías.

En México, celebro con soleado
corazón, a ese sol en flor, vestido
de amarillo, comiendo rojas sandías.



Reina nocturna


(Jotabé con estrambote)


¿¡Por qué eres gatita te abandonaron!?
Tus ojitos verdes nos conquistaron.

Cuando de cachorra llegaste a casa
supliste a mi sol; la huella que abrasa.
Tu cara chistosa provoca guasa,
extinguiendo el dolor de aquella brasa.

Eres tierna, igual de bonita, fina
reina nocturna, como luna albina.

De día o noche nos enajenaron
tus maullidos; quedé hecha migas, lasa.
Te pusimos por nombre Leonina.

Querida blanquecina,
que te recogimos de la basura.
Te pregunto ¿Esterilizarte es cura?



Rompiendo hábitos


(Jotabé Terzinas)


La vida sigue, a pesar del sabor
que dejaron las letras, con pudor.

Se acelera el ritmo del corazón,
el sentimiento teje hilos con don.
Surge en filigrana una religión
que armoniza contrarios, mi misión.

Desde el espejo al revés, pero en pie,
se ve más claro el mundo que mostré.

Las letras con sabor, pudor, honor,
corazón, don, religión, misión, son
el pie que mostré y que me une en la fe.



Maravilla del mundo moderno


(Jotabé)


Monumento de hierro, de una innegable
estética y arquitectura admirable.

A orillas del río Sena, de día
luce la arquería que en simetría
se eleva. Su esbeltez en sincronía
despierta en los turistas simpatía.

Visitantes tiene de todo el mundo;
para los galos orgullo rotundo.

Maravilla, patrimonio invaluable
de la humanidad; diseño y armonía
erigido con sentido profundo.



La vida en rosa


(Jotabé)


Triste estoy, si pienso en la despedida,
cual incierto, de la noche dormida.

De día, descorro el manto nocturno,
aunque, aún hay algo de taciturno,
el sol brilla en el horizonte diurno.
La luna se aleja, deja su turno.

Mas, si llegaran negras lunas, fiebres
del juicio, quiero que no te atenebres.

Construiré el monumento de la vida
en rosa -de la Francia me embadurno-,
para que veas luces y celebres.



Estrella de la mañana Maya


(Jotabé hexadecasílabo)


La cultura maya, honor hispanoamericano;
floreció dieciocho siglos, y siendo, el gran pueblo
[ hermano,

nos legó el conocimiento que hasta ahora nos fascina;
entre los dioses sorprende, como una flor matutina,
nuestro Señor Quetzalcóatl* que con plumas ilumina.
Progresó la alfarería, joyería en venturina

y turquesa fue valiosa. Los mayas dieron al cero
majestuosidad dorada, como el maíz es pionero.

El calendario perfecto, ¡que es sabiamente pagano!,
lo sagrado de la Tierra, los grifos en piedra fina
y códices futuristas, son la luz del dios lucero.



Dualidad Vs Trinidad


(Jotabejoa)


Nada somos sin masa, del alma la sustancia,
no somos nada sin semen, sólo fragancia;

fragmentos de semillas, de espinas la corona,
materia gris, crisoles sin ser soles. Persona
que vive en dualidad, brillante y testarrona;
ovejas blancas, negras, cual luna que se clona.

Buscas siembre sosiego, sin encontrar la paz;
la conciencia se aleja, como estrella fugaz.

No somos nada sin semen, sólo fragancia,
ovejas blancas, negras, cual luna que se clona.
La conciencia se aleja, como estrella fugaz.



Réquiem


(Jotabé Amirrima)


Recién emprendo el vuelo de mujer,
rezo con alas y empiezo a tejer.

Los sueños se tornan en caracol;
los de muerte avivan el tornasol,
los de vida en cruz, expiran al sol.
Lomas se engarzan con el girasol.

Nido tejiendo amarillo jardín,
ninfas cantan melodías sin fin.

Réquiem y esencias inundan mi ser,
los pies en la cruz, la vida en Crisol.
¡Niño-Padre que venid del confín!



Ave de paz y libertad


(Jotabejoa)


Libre como gaviota, mujer en son de paz,
del cielo y mar soy un ave, de la tierra, feraz.

Me alejo de tormentas y cuando sale el sol,
planeo con mis alas, anunciando el crisol.
Me fundo con la nube rojiza y tornasol,
mi luz se expande como guía, como un farol.

Soy mujer, soy sagrada; con la sabiduría
poseo el don del vuelo, que altivo asumiría.

Del cielo y mar soy un ave, de la tierra, feraz.
Mi luz se expande como guía, como un farol.
Poseo el don del vuelo, que altivo asumiría.



Mi sino


(Jotabejoa)


Lo que cae retorna, sube en la rueda eterna,
y siempre como amante, lo justo la gobierna.

Si las lágrimas caen en la tierra agrietada,
sedienta está de flores bellas; en temporada
fértil, la mala racha lleva canto y tonada,
de triste lira surge poesía rimada.

Mas la gota que torna por el feraz camino
se vuelca en universo sabio de albo destino

y siempre como amante, lo justo la gobierna.
De triste lira surge poesía rimada,
se vuelca en universo sabio de albo destino.



Esferas en máxima armonía


(2 Jotabea acentuación 3, 6, 9, 13)


Por si no se descorre la imagen del Señor,
en la copa del árbol se encuentra el ruiseñor.

¡Es su rostro sereno, que está en la sutileza!
En la mar es marea, la espuma de belleza.
Al sentirse la vida con plena fortaleza,
es el Cosmos divino que abraza ligereza.

Mas si llevas coraza, terminas en batallas.
Sin sosiego en la meta, la paz es lo que no hallas.

En la vida explosiva te llenas de dolor,
su raíz con opaca visión. En la tristeza
se te marca el enojo; los mares en que encallas.


Y la vida es difícil, si al paso del tablero
de ajedrez, vas sintiendo navajas y el acero.

Es que miras las horas oscuras que matizas
y tan sólo los negros y grises, visualizas,
y si enfocas los blancos, colores trivializas,
en la noche la estrella, tu guía, minimizas.

¡Renacer es urgente! Converge simetría
en la flor de la vida, que es llave de alegría...

Y la muerte, la aliada, conduce al farolero
por la senda arcoíris. Los sueños enraízas
en esferas de luces, de vida y sinfonía.


(Poema ganador del Cuarto Accésit del X Certamen Poético Internacional Rima Jotabé)



Gajes del buen saber


(Jotabé)


La habitación a veces rumorea,
casi casi, me da una cefalea.

Desde el gran espejo de la antesala
me dijo que el rumor está en la otra ala;
por lo tanto, luego fui a la otra sala,
con el plumero lo saqué a la mala.

Hay días que nada quieres saber,
sólo quieres estar junto a tu ser.

Es bueno liberar lo que se humea,
pues es mejor soltar lo que te cala.
¡Gajes del saber, para no caer!



El sitio donde siempre quiero estar


(Jotabé)


Se embriaga con la fruta y con la rosa,
con vid y con la esencia de la diosa.

Mujer de floridos amaneceres,
escapularios en atardeceres.
Abundan baños, dorados placeres,
se visten de luna los menesteres.

Fragancias exóticas de la mar
exaltan el vuelo del verbo amar.

Se elevan mariposas y me endiosa
este Edén con los más bellos deberes.
Tierra y cielo en exótico lugar.



Las palabras van


(Jotabem Bivocálico)


Las palabras van cansadas.
Abrazan cartas amadas.

Temen mecer el presente,
beben del beber regente.
Emergen del éter- mente,
celeste Belén, clemente;

palabras aladas salma,
para pasar a la calma.

Abracadabra; cascadas
del entender vehemente,
cantan atadas al alma.



Dedicado a Alejandro Fernández


(Jotabem Vereal)


Es cantante destacado
bien amado, bien amado.

Aclamado por la gente
permanece muy vigente,
ha dejado la simiente
concurrente, concurrente.

Al Potrillo es mi canción,
corazón, corazón.

Porque siempre laureado
permanece, simplemente
mi gorrión, mi gorrión.



Chispas


(Jotabé Misrrimo)


Cuando estaba triste llegó Chispita,
mi Ser se iluminó con la gatita.

Son verdes sus ojos, aceitunados,
tiene muchas manchas, por todos lados;
colores entre blancos nacarados,
negro, anaranjados y acastañados.

En su cara tiene una mancha negra,
parece una mueca en la boquinegra.

Suele rascar cuando algo necesita
y sus pelos se le ponen crispados.
¡Cuando maúlla a todos nos alegra!


Sabemos que quiere ir al arenero
a las dos de la tarde, y al comedero

a todas horas. Estamos confiados
al no tener temores infundados.
Si ella sale somos afortunados,
pues regresa a comerse sus bocados.

Dilatan en lo oscuro sus pupilas,
semi duerme y sus noches son tranquilas.

Es muy mimada, así yo lo asevero,
le gusta jugar con estambre y dados,
o cazar pájaros entre las lilas.



Esplendor


(Jotabem Agudo)


Me llegó el amanecer,
aprendí del florecer.

Descorrí al sol, su raíz,
llegué al crisol, su matriz.
Descubrí a la emperatriz
que a la luz sonrió, feliz.

Ir por el vector, confín
de amor, es sentir por fin

el frenesí; el renacer
de un clavel en un maíz
sabor a miel de jardín.



Chalchiuhtlicue *


(Jotabé tridecasílabo)


Cuando la antítesis se ha transformado en muerte
y el sueño es profundo, mi cuerpo queda inerte.

Por unos instantes la mariposa es hueso,
aparece el nardo como un trofeo teso.
La roca se aparta para salir ileso,
la flor se libera después de ser confeso.

De la roca brota la vara justiciera,
para devolverme la vida primavera.

Aguas cristalinas harán que me despierte;
la falda de jade, que es cuna con que meso
quimeras, muy fuerte, sonará en la rivera.

*En la mitología mexicana es la diosa de los lagos y de las corrientes de agua. También se le conoce como «la que tiene su falda de jade».

(Nombrada Mejor Jotabera de México en el II Concurso Poético Internacional La marimba canta en Jotabé)



El camino de la estrella de Belén


(Jotabea)


Humilde la posada, piden José y María,
y el niño en un pesebre nace, con alegría.

A su llegada todo cambió, se iluminaron
horizontes de blanco, luego se enajenaron
aquellos Reyes Magos, que al demonio libraron,
siguiendo azul estrella; gloriosa, le llamaron.

Representan los Magos la trinidad divina,
el camino difícil al Uno (llama trina).

Habitó el Niño Santo para el rey que amaría,
sabiendo del camino vano. ¡Ni claudicaron!,
ni perdieron la estrella de beldad, Celestina.



Navidad: Lazo familiar


(Jotabé Palabra)


Navidad es más que una tradición
decembrina, es un gran lazo de unión.

¡Navidad, blanca luz como la nieve,
en humilde pesebre que conmueve!
Al Niño Dios la Navidad te eleve,
por la senda de luz la pena es leve.

La Navidad trae felicidad
en imán de paz; huye la maldad.

¡Navidad, anhelada bendición!
De los cristianos el amor que mueve
familias en eterna Navidad.



En Nochebuena


(Jotabem Escala pentasílabo)


Sinceramente,
con aguardiente.

Enhorabuena,
la Nochebuena
no lleva pena;
en ti es colmena.

Concientizamos
y degustamos.

Alegremente
compartes cena
y así brindamos.



Mi deseo para el año 2021


(Jotabem)


Mi anhelo en el año nuevo
y que, en un gran globo elevo;

Haya salud para todos,
inmunidad en recodos
apartados e incomodos,
por sus costumbres y modos.

Que no haya segregación,
que se fomente la unión.

Deseo un mundo longevo,
que se sane en los periodos
de enfermedad, con la Unción.



Zarzuelas de mi corazón


(Jotabem Escala pentasílabo)


Atesoraban
cuando montaban

telenovelas
con triquiñuelas.
Y las zarzuelas
que son las velas

inmaculadas,
eran cerradas,

¡Encasillaban
como secuelas
las bien amadas!



¿Carne para falsos dioses?


(Jotabé tridecasílabo con estrambote, heterostiquios 6-7)


La rosa desprende los pétalos de sangre,
los dioses de blanco dejan que se desangre.

Ella se desprende de la vida afebril,
todo embona, mientras, el circo mercantil
siembra las ideas; perder un cenojil,
o el yugo que oprime, sosteniendo el pretil

para elevar falsos puentes de la beldad.
Cosméticos hacen y elixir anti edad,

con la esencia madre del feto «malasangre»,
humillando al verde de la rosa gentil
que es la luz del alma, que dona eternidad.

Rezo por la igualdad
por la no violencia, para no hacer arder
mutilada rosa que embriaga a lucifer.



Venus


(Jotabé)


Te seduciré con fragancia a rosas,
vestiré hoja de higuera, cual las diosas.

En el sabor de mis labios de seda
sentirás un embeleso que queda,
luego de levantar días de veda
como la ola de la mar que se enreda.

Te llevaré hasta la concupiscencia
siendo el génesis de la vehemencia.

En el Edén habrá almas luminosas,
pero, no con el rostro que preceda
a mi estrella, en su divina presencia.



Dulce interpretación


(Jotabé Antos)


La desgracia llegó, más la fortuna
no olvidaré, evocaré a la gran luna.

Sellaré el pacto: no callar y hablar
del gozo, sin la pena por juzgar
la maldad, pues el bien para crear
se usa, aleja el llanto, hay risa al sanar.

La antítesis se combate con tesis,
la muerte con vida, sin la mimesis

del amor; ya que el odio sólo acuna
apatía, y el interés hace honrar
al Ser: la sal como dulce exegesis.



El vagón de tercera clase


(Jotabé)

(Écfrasis del cuadro El vagón de tercera clase de Honoré Daumier)


Cuerpos cansados y miradas tristes,
sin ánimos de comentarse chistes.

Así viajan los pobres en el tren,
decaídos y en silencio; se ven
un jovencito dormido, un recién
nacido envuelto con mantas, muy bien.

Destaca la mirada de una anciana
con caperuza y canasta liviana.

Sus manos juntas, como cuando asistes
solo en oración, siendo ésta el sostén
de fe en el viaje de cualquier cristiana.


El vagón de tercera clase




Aromas de campiña


(Jotabé tridecasílabo)


En campos azules me fundo con el cielo,
me elevo, y en el gozo, la magia de mi vuelo.

Aromas de flores ignotas me rodean;
del cielo acunado los listones se arquean,
y siete colores a lo lejos bordean
un ramo de nubes que al paisaje laurean.

Mi ser se extasía con sublime belleza,
y siento que bailo cantares de nobleza.

Existen ensambles, paraísos sin velo,
si mi alma se expande, si en mis alas se crean
celestes jardines, misticismo y grandeza.



La tortuga marina


(Jotabem con estrambobe)


La tortuguita marina
corre riesgo en la isoclina.

En las aguas calientitas
come de algas exquisitas.
¡Y en grupo tú, muy chiquitas
las ves, como figuritas!

Al crecer es más preciada
por la sangre codiciada.

En estadio de heroína,
por razones circunscritas;
deja que ella sea criada,

instalada
en vasta zona marina;
protegida área fina.



El tiburón


(Jotabem)


Es un depredador tope,
no te confíes, no es miope.

Hay tiburones ballena;
aunque es robusto, pepena
su comida. Una morena
es más mortal en la arena.

Su gran aleta es preciada;
delicia que es cocinada.

Da tristeza el escalope
que desechan en faena.
Y luego... ¿Por qué no hay nada?



La orca


(Jotabem con estrambobe)


Los delfines son parientes
de la orca. Ambos tienen dientes.

Ballena asesina, es nombre
común. Así puso el hombre
a ella, como sobrenombre;
sin caer en el renombre,

son las orcas muy sociables,
se agrupan siendo indomables.

Cazan con inteligentes
tácticas de superhombre.
¡Cierto es que son implacables!

Detestables
son los juegos de insolentes;
cacerías de imprudentes.



Granja de pollos


(Jotabem)


Hablar de la avicultura,
como gran industria dura,

es descorrer falsedades,
vejaciones y crueldades.
Someter a densidades
tupidas, en unidades

llamadas jaulas, es cruel.
Como si fuera un cuartel,

cortan picos sin cordura;
enferman por ansiedades.
¡Crecen sin ver un clavel!



La danza del alacrán


(Jotabem con estrambote)


El alacrán es de tierra
bravía. Habita en la sierra.

Inspira la greguería
que traigo hoy para este día;
una gitana movía
su falda y la retorcía,

sonando las castañuelas
hasta que rompió las suelas.

Después, volviendo a la guerra,
mordió la cola; moría,
como alacrán con chinelas.

¡Sanguijuelas!
Su aguijón no tiene nombre,
déjalo vivir cruel hombre.



Mi chihuahua


(Jotabem con estrambote)


Hoy toca narrar la historia
de mi perrita Victoria,

que enfermó de la matriz.
Pueda que en este cariz
que tiene una directriz,
te deje una cicatriz.

Cuatro meses ella estuvo
canalizada y mantuvo

su escualidez, sin euforia.
Una amiga muy infeliz
en su juicio me sostuvo,

(no se abstuvo):
La dejaría morir…
Me dejó sin que decir.



El colibrí


(Jotabem Espejo)


Muéstrame colibrí bello,
dame del sol el resuello.

Dichoso es mi corazón,
me elevas al orfeón.
Hoy para ti es mi canción,
mi vuelo en levitación.

Tus patitas perfumadas
con las flores enlazadas

son mi lumen. Y centello
luz con ruido en colofón,
por tus alitas doradas.


Sufro cuando sus amadas
alas rompen sin razón
en el ventanal; el cuello

y plumas son destrozadas,
y así quedan fulminadas;

leva helado, sin misión.
¿Podrá ser la radiación?
¿Quizá contaminación?
Te dejo esta reflexión;

maltrato que ahora sello
con el testimonio de ello.



El pez vela


(Jotabem)


Te quiero narrar un cuento
que me dejó sin aliento.

Se trata del gran pez vela;
tan bello es, que a otros recela,
como al pez marlin que anhela
nadar bajo su tutela.

Se pegó como un gemelo,
sin lograr su audacia en vuelo.

El pez vela es un ostento,
se aleja dejando estela,
huye del mortal anzuelo.



El delfín


(Jotabém con estrambote)


Al cetáceo pequeño
de los mares hoy te enseño.

No confundir con ballena.
Su color es negro o arena,
y al realizar faena
se mueve de forma amena.

Te saluda bien erecto,
amigo es en el trayecto.

Es dinámico y risueño,
con el marino se entrena.
EL delfín tiene perfecto

intelecto,
sana con cantos a niños,
aportando más cariños.



Longanimidad*


(Jotabé)


Hay un misterio que sería muy bueno
descorrerlo, para que en lo sereno

no nos sorprenda como novedad.
Somos estrellas, no es trivialidad,
seres de luz en la totalidad;
de la creación puzle en unidad.

¡Es la ilusión, que ve solo el fractal!
pero somos también, llama grupal.

Al comprender el corazón es pleno,
no hay razón para estar en soledad.
En unión/llama, aurora boreal.

*Del latín; significa alma extensa



La estrella vacía


(Jotabé tetradecasílabo)


Cuantas veces hemos visto una estrella brillar,
de diarios vacíos, la podemos recordar.

Con tal de alcanzar la cima a el alma se le vende
por la fama y fortuna. La dignidad se ofrende
al mismo Luzbel, pensando quizá que este entiende
de imagen, de belleza, pues lo que haga trasciende.

Muestra el espejo de una falsa realidad
y entre más se mira tiene más banalidad.

El alma, candil de la calle, tiende a levar,
y luego en debacle, por la oscuridad desciende.
En su pozo no hay una sola gota de bondad.



Alba estrella


(Jotabé tetradecasílabo)


En una noche oscura vi una lluvia de estrellas,
pedí mi deseo, y volvieron millares de ellas.

Abrí la mano, cogiendo la que más brillaba,
y las demás partieron, a la vez yo temblaba.
Paloma blanca, sí que era, y entretanto rezaba
sentí al Espíritu Santo que me visitaba.

Su luz en mi alma, como agua penetró bendita,
después, la rosa cruz dorada fue zirconita.

En un Lucero del alba que aleja querellas,
se transformó. De la pureza amor emanaba,
por siempre iluminando, con su luz infinita.



Ramo de arcoíris


(Jotabé con estrambote)


Bienvenidos sean, niños del mundo,
al lugar de las hadas que segundo

a segundo vibra en sus corazones,
invitando a soñar con biberones,
o si caminas, corres con balones,
y te portas muy bien, con colaciones.

Al crecer tendrán juegos de ensamblaje,
que proyectarán en aprendizaje.

¡Canten!, y no sepan del inframundo.
¡Rían!, sin pensar en separaciones,
que de unidad saben y de hospedaje.

Jugar es un paisaje
arcoíris, con "enanos" felices;
puente que une a través de directrices.

 
     
   
     
 
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